Bill Bonner se encarga del centenario archivo fotográfico de National Geographic.
?He visto todo el mundo, no como es ahora, sino como era hace 100 años?, dice Bill Bonner, archivista de National Geographic desde 1983.
Con una historia de más de un siglo, los archivos de National Geographic tienen alcances profundos al igual que la experiencia de Bonner. Calcula que ha tenido en sus manos -con sus característicos guantes blancos- cientos de miles de imágenes, pero aún trata de encontrar su camino entre los ocho millones de fotografías e ilustraciones de la colección. La mayoría permanece sin publicar y nunca vista por alguien más.
?Tenemos unas 12,000 ilustraciones, una de las colecciones más grandes de autocromos -afirma Bonner-. Tenemos fotos de los años setenta del siglo XIX, impresiones en blanco y negro coloreadas a mano?.
Trabaja solo, en una habitación con clima controlado y sin ventanas en el sótano de las oficinas en Washington, D.C. Además, cura imágenes para clientes externos, libros y ?Bajo la Lupa?, en la última página de cada edición.
Bonner puede encontrar una imagen que no ha visto en cinco años y recordar al fotógrafo que la tomó, la locación y el artículo con la que está vinculada. A diferencia de las imágenes, dice, su trabajo, ?no envejece. Eso es seguro?.