Ya hay seis propuestas finalistas para adaptarse a la letra del himno de 1841.
Habrá que ver quién canta. Los suizos conocen muy bien la situación, pues cada vez que su selección de futbol tiene que entonar el himno nacional, algunos jugadores apenas mueven los labios o directamente callan. Y especialmente para los jóvenes, resulta comprensible: el "Salmo Suizo" de 1841 es, para muchos, una reliquia.
"Cuando el sol anuncia un brillante despertar sobre nuestras montañas y predice el regreso de un día aún más hermoso, las bellezas de la patria hablan al alma enternecida…" Así comenzaría una posible traducción al español de la versión francesa del himno, una de las cuatro con que cuenta el país por cada lengua oficial (junto al alemán, italiano y romanche). Sin embargo, el "Salmo Suizo" tiene los días contados: el país busca nuevo himno nacional.
La iniciativa corre a cargo de la influyente sociedad SGG. De las 200 propuestas recibidas fueron seleccionadas seis, que ahora se someten al voto popular a través de Internet. "Esperamos que el nuevo himno se conozca más y todos lo canten", dijo el presidente de la SGG, Jean-Daniel Gerber. La letra ha de ser pegadiza y contemporánea, señalan los organizadores; un himno que encaje con la Suiza moderna.
Además, tendrá que ser necesariamente unificador, pues las comunidades de habla alemana, francesa, italiana y romanche no se entienden entre sí todo lo bien que sería deseable. "La pregunta de qué es lo que mantiene unida a Suiza vuelve a avivarse actualmente una y otra vez", se lee en la web de la SGG. "La Romandía y Tesino se sienten culturalmente más inspiradas por París y Lyon, Roma y Milán, que por Zúrich, Berna o Basilea".
Ya se verá si el nuevo himno logra cambiar esta situación. De momento, el 15 de mayo se elegirán tres finalistas de entre las seis propuestas seleccionadas e interpretadas por un coro juvenil. Y el 12 de septiembre, los suizos podrán votar vía sms y teléfono cuál es su favorita en el marco del programa de televisión "Potzmusig". Eso sí, la idea no ha entusiasmado a todos: el diputado del conservador SVP Peter Keller habla de "casting absurdo" y otros detractores sostienen que no hace falta himno nuevo alguno y amenazan con una iniciativa popular contra el proyecto.
En cualquier caso, antes de que la propuesta ganadora fuera declarada nuevo himno por el gobierno de Berna sería necesario celebrar un referéndum. Además, no está claro que la nueva letra vaya a resultar mucho más moderna que la anterior y, en cuanto a la melodía, la SGG sostiene que sólo hay que adaptarla para que tenga algo más de ritmo. Aunque en las seis propuestas semifinalistas no hay ninguna frase sobre las nieves alpinas que sonroje a los suizos, las letras tampoco están libres de palabras rimbombantes.
"Nosotros, el pueblo de la libertad, vivimos en pro de la unidad. Vamos de la mano en Suiza", reza por ejemplo una de las candidatas. Y otras se asemejan a un anuncio turístico: "En las cimas de las montañas, ciudades y lagos, todos amamos los encantos de la hermosa Suiza". "Ya desde la antigüedad amamos la libertad", propone otro compositor. O "Una cruz blanca sobre fondo rojo, cantemos juntos", se lee en otra. ¿Son estos los aires modernos del nuevo "Salmo Suizo"?, se preguntan muchos.