El tren que viaja por la sierra tarahumara.
La ruta completa dura 12 horas desde Los Mochis hasta Chihuahua. El ferrocarril Chepe se detiene un máximo de 20 minutos en la decena de estaciones para subir o bajar pasaje, o por aquello de las fotografías. Con un mismo boleto uno puede apearse en el corazón de la Sierra Tarahumara y abordar al siguiente día sin ningún problema, extendiendo la travesía de acuerdo a las necesidades y querencias del viajero.
Detrás del cristal, me había convertido en un niño descubriendo el mundo, todo era nuevo otra vez, desde aquel árbol viejo hasta los pájaros que juegan carreritas contra el ferrocarril, aquella roca también.
Los vagones tienen aire artificial, sillones que invitan al descanso, amplias ventanas; entre cada uno hay vestíbulos donde puede sentirse el viento romper en el rostro y se alborotan los cabellos. Uno de los vagones es un restaurante donde los pasajeros brindan y degustan el ?sabo de la Sierra Tarahumara?, así dice en el menú, que comprende tacos de pollo a la mexicana, pechuga a la plancha y huevos al gusto, todo condimentado con especias místicas de los tarahumaras.
El tren funciona por sistema eléctrico, silbatazos anuncian llegadas y salidas de estaciones; mientras avanza, a no más de 90 kilómetros por hora, la locomotora despide nubecillas de humo blanco como una taza de café. Veamos animosos cómo el expreso gana altitud después de la Estación El Fuerte -declarado Pueblo Mágico-, cómo deja atrás los sembradíos, cactus, los parajes semidesérticos del noroeste mexicano y se adentra en una fresca sierra. Y aunque todavía modestos, nacen a la vista los primeros pinos.
Encuentra la historia completa en la edición de septiembre de la revista National Geographic Traveler.