En Playa Icacos, en el estado mexicano de Guerrero, una suite que le hace competencia a las palmeras.
En Playa Icacos, en el estado mexicano de Guerrero, una suite que le hace competencia a las palmeras.
Si paseas a la orilla del Resort Playa Viva notarás que entre sus poco más de 800 mil metros cuadrados sobresale una construcción elíptica de bambú que se camufla entre las palmeras y la vegetación, se trata de una habitación elevada con vista al mar de nada menos que 200 m².
En un inicio es difícil distinguir el interior del exterior, pero una vez adentro, lo único que es claro es la comodidad que se tiene al vivir en plena jungla. En el nivel inferior se encuentra la sala y el baño (que se puede tomar al aire libre resguardado por bambúes) y arriba se instaló el área de dormir con balcón hacia el mar.
El suelo y techo de madera expuesta completan el ambiente natural, mientras que detalles de textiles y piedras locales le dan un acabado artesanal a la suite. ¿El mejor lugar para pasar un momento mágico mirando las estrellas? Sus hamacas para dos personas.
Este espacio le ofrece una escapada ideal a los amantes de la naturaleza ya que, además de encontrarse en medio de la selva, funciona de manera ecológica utilizando energía solar y agua reciclada.
El resort ofrece clases de yoga cada mañana para que aproveches el momento y te sientas en balance con el entorno.
Si se te antoja consentirte con un fin de semana en este pequeño paraíso, el precio de las habitaciones va desde los 445 a los 620 dólares y puedes reservar a través de Internet en el sitio: playaviva.com.
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