En Nueva Zelanda un músico y cazador de fósiles halló los restos de un cangrejo gigante que vivió en el Mioceno.
Lejos de los científicos especializados en buscar restos de vida pasada, hay cazadores independientes con el mismo objetivo. Estas personas también han hecho descubrimientos enormes, como producto de las muchas horas que invierten a su afición. En este sentido, de Nueva Zelanda llega uno de los casos más recientes del género, uno que saca a la luz el fósil de un cangrejo gigante.
De acuerdo con un reciente artículo publicado en la revista New Zealand Journal of Geology and Geophysics, Karl Raubenheimer, un músico, que también dirige un canal de YouTube dedicado a fósiles, hizo el asombroso hallazgo de un fósil perteneciente a un cangrejo gigante. Esta criatura figura como una especie completamente nueva y recibió el nombre de Pseudocarcinus karlraubenheimeri, en honor al cazador que dio con su primer ejemplar.
Sus descendientes siguen aquí
El animal que nos da cita vivió en el Mioceno, hace unos 8,8 millones de años. Su caparazón llegaba a medir hasta 20 centímetros. Los miembros de la especie debieron vivir en aguas de varios cientos de metros de profundidad, donde los científicos sospechan que se alimentaban de otros crustáceos, almejas y caracoles.
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A pesar de que estos cangrejo están ya extintos, sus descendientes, los cangrejos gigantes del sur o cangrejos gigantes de Tasmania (Pseudocarcinus gigas), siguen compartiendo el planeta con nosotros.
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Con este eslabón hallado, los científicos refuerzan su optimismo por descubrir cómo se llegó hasta los cangrejos de nuestros días.
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