Estas proteínas de tiburón tienen la capacidad de frenar sus variantes y los coronavirus relacionados infecten las células humanas.
El último gran reto al que la humanidad se ha enfrentado está relacionado con el COVID-19 y el objetivo de encontrar una solución definitiva ante esta enfermedad. Conforme el tiempo pasa, las esperanzas crecen cuando los expertos encuentran nuevos hallazgos que tendrían la capacidad de hacer frente al virus de mejor manera. Recientemente se dio a conocer un nuevo estudio que tiene que ver con las proteínas de tiburón y la capacidad que tendrían para neutralizar el COVID-19.
Según un nuevo estudio publicado el 16 de diciembre de 2021, un grupo de proteínas similares a los anticuerpos conocidas como VNAR, pueden impedir que el virus causante del COVID-19 infecte las células humanas.
Estas proteínas, derivadas del sistema inmunitario de los tiburones, también tienen la capacidad de frenar sus variantes e impedir que los coronavirus relacionados infecten las células humanas. A pesar de que en este momento estos nuevos VNAR no estarán disponibles como tratamiento, pueden ayudar a prepararse para futuros brotes de coronavirus.
Según pudieron comprobar los responsables del estudio, estos VNAR de tiburón fueron capaces de neutralizar el WIV1-CoV, un tipo de coronavirus capaz de infectar las células humanas pero que actualmente sólo circula en los murciélagos. Hay que recordar que hay grandes sospechas de que el SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19, haya pasado de los murciélagos a los humanos.
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Un hallazgo que puede abrir las puertas para investigar otras enfermedades
«El gran problema es que hay una serie de coronavirus que están a punto de aparecer en los seres humanos», dice Aaron LeBeau, profesor de patología de la Universidad de Wisconsin-Madison en el Centro Oncológico Carbone que ayudó a dirigir el estudio.
«Lo que estamos haciendo es preparar un arsenal terapéutico de VNAR de tiburón que podría utilizarse en el futuro para los brotes de SARS. Es una especie de seguro contra el futuro».
Estos fármacos son más fáciles de fabricar a comparación de los anticuerpos humanos. Todavía no se han hecho pruebas en el organismo humano.
Aaron LeBeau también está estudiando la capacidad de los VNAR de tiburón para ayudar en el tratamiento y diagnóstico de los cánceres, algo que revolucionaría la medicina actual al extender una solución a múltiples enfermedades de difícil tratamiento.
El estudio
Los investigadores hicieron dos pruebas paralelas contra el SARS-CoV-2: una con los VNAR de tiburón y otra contra un «pseudotipo» del virus que no puede replicarse en las células. Se identificaron tres VNARs candidatos (de entre un conjunto de miles de millones) que impidieron que el virus infectara las células. Cabe destacar que los tres VNAR también fueron eficaces contra el SARS-CoV-1, el mismo que causó el primer brote de SARS en 2003.
El VNAR denominado 3B4 se adhirió de manera sólida a un surco de la proteína viral de la espiga, cerca de donde el virus se une a las células humanas. Este surco es tan similar entre los coronavirus genéticamente diversos que permite incluso que el 3B4 neutralice el virus MERS, un primo lejano de los virus del SRAS.
La capacidad de unirse a regiones tan conservadas entre diversos coronavirus hace que el 3B4 sea un candidato ideal para luchar contra los virus que aún no han infectado a las personas.
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