El paso de un violento huracán puede afectar significativamente a los animales marinos, ya que altera sus ecosistemas con rapidez.
Los huracanes son un tipo de ciclón tropical. Se les puede entender también como fenómenos atmosféricos capaces de ocasionar inundaciones, lluvias torrenciales y vientos fuertes. En total, todo esto suma a una crisis que enfrentan algunas regiones de la Tierra, en ciertas temporadas. Desde luego, el paso de dichos ciclones deja tras de sí numerosos daños, humanos y materiales. No obstante, ante eventos de esta magnitud, también es importante saber qué les pasa a los animales marinos durante un huracán.
Los animales marinos y los huracanes
Indudablemente, más allá de las afectaciones a la superficie, el medio marino es también una de las víctimas de los estragos generados por un huracán. En el océano, cuando estos fenómenos naturales suceden, se agita el agua y se alteran los sedimentos.
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Los efectos son variables, explica Melissa May, profesora adjunta de biología marina de la Universidad de la Costa del Golfo de Florida, a ScienceAlert. En ocasiones, estos ciclones tropicales actúan como una marea inusualmente alta, dejando algunos entornos marinos casi intactos. Sin embargo, otras veces las secuelas, como cambios en la salinidad, hasta una afluencia de sedimentos y bacterias, pueden ser graves para esos ecosistemas.
Cuando el impacto de un huracán se torna nocivo para la vida marina, generalmente, se debe a dos cambios: los de temperatura y los de salinidad. Los primeros se derivan de las olas masivas que mezclan las aguas calientes de la superficie con las frías de las profundidades. Ello, por ejemplo, desorienta a algunas especies e, incluso, puede llevarlas a la muerte.
Luego, están las alteraciones en la salinidad. La combinación del agua dulce de las fuertes tormentas con la salada del mar hace que el oxígeno llegue a la capa salina de abajo con mayor dificultad. Esta alteración produce lesiones en ballenas, delfines y marsopas. En los grados más extremos, la muerte es una de sus posibles consecuencias.
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Igualmente, se puede añadir que, en zonas de menor profundidad, los huracanes levantan la arena, haciendo que muchos peces mueran debido a esa obstrucción en sus branquias.
Sin embargo, parte de la fauna marina puede responder a las señales de una inminente tormenta, al menos así lo consideran varios científicos. Y es que la disminución de la presión barométrica y los cambios de temperatura sirven como alertas para muchas especies que, ante los cambios, se desplazan hacia aguas más profundas y tranquilas.
En caso de que los animales marinos no logren escapar de la trayectoria del huracán, estos pueden quedar atrapados en zonas donde la cantidad de agua dulce no les permita sobrevivir.
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