Más allá de las semejanzas que comparten las especies, en el exterior, hay algo en su interior que es clave para definir qué es esta unidad taxonómica.
Quienes gustan de la biología sabrán que un concepto básico de ese conocimiento es el de las especies. Sin embargo, definir qué es una especie no ha sido tarea sencilla e, incluso ahora, podrían abrirse debates alrededor de la cuestión.
Ya bien lo decía el naturalista inglés, Charles Darwin: «Es realmente risible ver las diferentes ideas que predominan en las mentes de varios naturalistas cuando hablan de ‘especies’«.
Para el autor de El origen de las especies, el principal problema en el asunto es que se ha buscado definir lo indefinible. Darwin argumentaba que las especies no estaban dadas de forma natural, ya que cada grupo de organismos, que llamamos “especie”, comienza siendo una variedad de otra más antigua. Ya son, el tiempo y la selección natural, los responsables de transformar a los seres vivos, a causa del entorno y la adaptación.
Pero, claramente, mucho ha pasado en el mundo de la ciencia desde entonces. En los tiempos de Darwin los naturalistas fundaban su criterio, para distinguir a una especie de otra, casi solo en lo que sus ojos les mostraban.
Hasta el siglo pasado, un factor más entró en la ecuación de definir a las especies: la genética. Con ese gran paso, también se avanzó en el camino hacia una noción más precisa sobre qué es una especie. Esto es lo que sabemos ahora.
¿Qué son las especies?
Actualmente, de acuerdo con la revista especializada, Nature, las especies biológicas son definidas como organismos que pueden reproducirse entre sí en la naturaleza y producir descendencia fértil. Visto de otra manera, una especie se caracteriza por estar reproductivamente aislada de otra.
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Ahora bien, una especie es la categoría más básica del sistema taxonómico. En este sentido, recordemos que la taxonomía es un medio científico que clasifica los organismos en categorías, en función de sus características biológicas.
¿Por qué es importante clasificar las diferentes formas de vida?
Para contestar esta pregunta, recurrimos al Convenio sobre la Diversidad Biológica. Conforme a la información que se comparte en este acuerdo, la importancia de clasificar la vida reside en que, al categorizar, se produce conocimiento acerca de los componentes de la biodiversidad, necesarios para tomar decisiones eficaces sobre su conservación y uso sostenible.
¿Cuántas especies hay en el mundo?
Conocer cuántas especies hay en el mundo, con exactitud, es una tarea casi imposible. En gran parte porque el número debe estar oscilando constantemente con los seres vivos que están extinguiéndose. Además, dar una respuesta precisa significaría que tenemos un conocimiento total del planeta, cosa de la cual aún estamos muy lejos.
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Con todo, al menos en lo que se refiere a plantas y animales, los científicos calculan que existen unos 8,7 millones de especies. No obstante, hasta ahora, solo se han identificado y descrito 1,2 millones. La mayor parte de ese número corresponde a los insectos.
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