Un experto en virología nos explica la gravedad del Zika y de otras epidemias que nos han enfrentado.
En medio de la alerta por el Zika, el sello editorial Naukas presentó en Madrid su primer libro, "Virus y pandemias", que repasa epidemias como la del Ébola pero también el uso que puede hacerse de los virus para luchar contra enfermedades. Su autor, el profesor Ignacio López-Goñi, habló sobre estos pequeños agentes infecciosos que conviven con el ser humano.
¿Cuál es el origen de los virus?
López-Goñi: Realmente no se sabe su origen, hay distintas hipótesis y todas tienen su parte de verdad. Hay algunas que dicen que pueden ser reliquias de la evolución, otras que han podido ser células normales que por evolución regresiva se van simplificando y otras que, dentro de las células, algunas moléculas de ARN (ácido ribonucleico) tienen capacidad de escapar y producir infecciones. Probablemente hay un origen diverso de los virus, pero están aquí desde el origen de la vida y siempre han estado infectando células.
¿Son necesarios para la vida?
López-Goñi: La inmensa mayoría infectan las células y producen enfermedades. Pero hoy podríamos decir que sin virus no podría ser la vida en el planeta, porque han contribuido a la evolución y a aumentar la diversidad genética de los seres vivos. Probablemente hoy somos lo que somos gracias a las infecciones de hace millones de años.
¿Cuál ha sido la peor pandemia hasta ahora?
López-Goñi: La Viruela ha sido una de las enfermedades víricas más devastadoras, se calcula que en siglo XX unos 300 millones de personas murieron por viruela. Otra pandemia muy importante fue la de la gripe de 1918 (…), más mortífera que las Guerras Mundiales. Y ahora el SIDA, no podemos olvidar que hay 60 millones de afectados, ha habido 35 millones de muertos.
¿Y el Ébola?
López-Goñi: El Ébola no fue una pandemia, fue un brote epidémico muy localizado. Probablemente por sus características, el Ébola nunca acabe siendo una pandemia. Por la forma de transmitirse el ébola -por un contacto estrecho con una persona muy grave- y con una tasa de mortalidad muy alta, este se autolimita, con lo cual hasta la epidemia del año pasado siempre fueron focos muy aislados.
¿Qué cambió en 2014 para que se diese una epidemia mayor?
López-Goñi: En todos estos casos ocurre la "tormenta perfecta". Por un lado, se dio un desarrollo de las comunicaciones en esa parte de África, poniendo en contacto aldeas con ciudades; coincidió en tres países donde las condiciones sanitarias y económicas son desastrosas, y también están los ritos funerarios de aquella zona, en la que al fallecido se le vela de una manera efusiva.
¿Fue adecuada la actuación de la Organiación Mundial de la Salud (OMS)?
López-Goñi: Probablemente habría que haber actuado con mayor velocidad. Lo ideal, y se ha hablado en algunos foros internacionales, es llegar a tener unos cascos azules sanitarios, un ejército internacional sanitario que pueda actuar en condiciones de crisis sanitarias. Hay que reconocer que la estrategia militar en cuestiones de crisis funciona, son capaces de movilizarse y de montar hospitales de campaña, etcétera. Esa estructura en un ambiente sanitario es lo ideal.
¿El Zika ya es una pandemia?
López-Goñi: Afecta realmente a todo el continente americano, así que sí podríamos considerarlo una pandemia. (Lee: Transmisión sexual y otras sorpresas del Zika)
¿Crees que hay un vínculo entre el Zika y la microcefalia?
López-Goñi: Diagnosticar la microcefalia es difícil y sus causas pueden ser genéticas, pueden ser ambientales y pueden ser infecciones. Se sabe que citomegalovirus, herpes, VIH, rubeola, y toxoplasma en los primeros meses del embarazo pueden producir microcefalia. El que haya un virus que produzca microcefalia está descrito, ahora el asunto es llegar a demostrar la causalidad, cosa que no es fácil. Probablemente haga falta bastante tiempo de estudios para determinar si la causa es el Zika. De todas maneras el asunto es muy grave y de ahí viene la alarma de la OMS, que en este caso a mí sí que me parece acertada. Lo que está diciendo es que esto hay que estudiarlo. No se puede esperar a dentro de un año o dos años, a decir que sí era la causa, que no se ha hecho nada y que hay miles de niños con esos problemas. (Fotografías: El impacto del Zika en las calles de Brasil)
¿Qué posibildades hay de que se desarrolle pronto una vacuna?
López-Goñi: El problema es que el Zika se había estudiado muy poco porque no tenía gran interés, pero se está aplicando un poco la tecnología que ya se estaba desarrollando para las vacunas del dengue, porque son virus muy parecidos. Se puede aprovechar lo que ya se está haciendo con el dengue. Pero tardará años.
¿Son efectivos los experimentos con mosquitos genéticamente modificados para controlar enfermedades como el dengue?
López-Goñi: Me parece una solución atractiva que hay que continuar. Se trata de crear estirpes de mosquitos que cuando fecundan a la hembra producen una descendencia estéril, de manera que en varios ciclos se acaba disminuyendo la población de mosquitos. La ventaja es que probablemente sea muy selectivo frente a determinadas especies de mosquitos. Ahora hay quien dice que lo del zika es debido a mosquitos transgénicos que se soltaron en Brasil para controlar el dengue, yo sinceramente esto no me lo creo hasta que no vea datos.
¿Y qué piensa de la hipótesis sobre una relación entre el uso de pesticidas y lo que está ocurriendo?
López-Goñi: Ahora están corriendo lo que considero bulos, como los mosquitos transgénicos, el complot de las farmacéuticas y de la OMS para controlar la natalidad en Latinoamérica o para vendernos vacunas… En mi opinión todo eso son bulos en los que no hay ninguna base científica. Lo del Zika se explica simplemente mirando cómo funcionan la naturaleza y la evolución, cómo funcionan los virus, los mosquitos. El zika es un ejemplo más de virus que ha reemergido, pero la naturaleza tiene suficientes recursos para crear este tipo de virus pandémicos sin necesidad de recurrir a complots extraños. (Lee: ¿Son necesarios los mosquitos?)
¿Cómo influye el nivel de desarrollo de un país en la expansión de un virus?
López-Goñi: Totalmente. Lo hemos visto con el Ébola: en ese caso uno de los primeros tratamientos era la hidratación de la persona, pero para eso necesitas unas instalaciones mínimas que no había en esos países. Ahora con el Zika, probablemente en Estados Unidos se extienda menos porque están más acostumbrados, hay más extensión de los sistemas de aire acondicionado, es más difícil que los mosquitos entren en las casas, hay menos balsas de agua donde puede reproducirse… Las condiciones tanto sanitarias como de desarrollo de un país influyen muchísimo en la extensión de estas enfermedades.
Ignacio Gómez-Goñi nació en Pamplona, España. Tiene 53 años, es profesor de microbiología y virología en la Universidad de Navarra, colabora con la web de divulgación Naukas y es autor del blog microBIO. También es coautor del libro "Las vacunas funcionan".