Carlos III, el llamado príncipe del cambio climático, se ha convertido en rey y es ahora quien deberá tomar las riendas de la crisis.
Un nuevo monarca ha asumido el trono y la incertidumbre sobre la corona inglesa es más grande que nunca. Si bien el rey Carlos III llevaba toda su vida preparándose para el cargo, se encuentra frente a muchos retos que deberá superar.
Uno de los temas fundamentales que atañen todos los países del mundo es la crisis climática que avanza a pasos agigantados. Durante lo que va del año, Reino Unido ha presentado temperaturas nunca antes vistas e incrementos inverosímiles del nivel del mar. La situación es tan crítica que ciudades enteras están comenzando a desaparecer debajo del agua.
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Carlos III y su postura frente a la crisis climática
No es un secreto que Carlos III ha hablado del cambio climático desde antes de ser rey pero no será fácil enfrentarse a los efectos que ha tenido la corona británica sobre el medio ambiente por décadas. Desde la contaminación industrial por las grandes fábricas inglesas, hasta la pérdida de biodiversidad marina, los líderes de Gran Bretaña han sido responsables de parte de la catástrofe natural.
“Cualquier líder que se haya tenido que enfrentar a retos tan amenazantes, sabe que el costo de la inacción es mucho mayor al costo de la prevención,” mencionó durante su participación en la 26ª Cumbre del Clima, llevada a cabo el año pasado.
A pesar de sus esfuerzos como activista ambiental, el país que lo recibirá en el trono se enfrenta a una fuerte crisis energética derivada del conflicto armado en Ucrania. Gran parte de los países europeos dependen del gas importado de Rusia para abastecer sus ciudades. Meses después de que la invasión iniciara, sus efectos se están extendiendo a lo largo de Europa en forma de recibos incosteables de calefacción y energía eléctrica.
Seguir con el activismo ambiental sería «absurdo»
Lejos de su postura sobre la crisis, el nuevo rey de Gran Bretaña aseguró en una entrevista para la BBC en 2018 que «un soberano no puede hacer lo mismo que un heredero.» Charles III argumenta que sus acciones tendrán que acatar los parámetros constitucionales, los cuales no le permiten actuar y posicionarse como lo ha hecho hasta ahora.
Durante dicha entrevista, declaró que su campaña ambiental se detendría en cuanto asumiera el trono, sin embargo el mundo necesita más que nunca líderes que se preocupen por dar soluciones a una crisis para la que, citándolo, «el tiempo se ha agotado, literalmente.»
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