Una ola de calor extremo destroza récords y deja cientos de muertes en Norteamérica

El noroeste de América está ardiendo: las temperaturas extremas mayores a 45ºC provocadas por la ola de calor ya están cobrando vidas humanas mientras se superan a sí mismas.

En dos días consecutivos, la ola de calor que está azotando Estados Unidos y Canadá ha batido récords históricos. Las temperaturas son tan altas que se han superado a sí mismas en menos de 48 horas. En la Columbia Británica, al oeste de Canadá, el termómetro marcó 46.6°C el domingo 27 de junio, un récord absoluto para el país, que fue superado en menos de 24 horas cuando el poblado de Lytton alcanzó los 47.9°C.

En consecuencia, el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos alertó a la población para que tome sus precauciones si necesitan salir de casa.

Particularmente en el noroeste del país, durante tres días seguidos, la temperatura ha sido descrita como «inusualmente caliente» e «inaudita«. Con 45ºC, esta racha podría prolongarse hasta por 5 días consecutivos. Al respecto, ambientalistas y científicos de diversas disciplinas concuerdan en que ésta es una probada apenas de lo que la crisis climática nos deparará en un futuro cada vez más cercano.

Sequía, sudor y saldos en vidas humanas

Más allá de la incomodidad que representa estar cubierto en sudor todo el día, la ola de calor que alcanzó el norte del continente americano ya cobró cientos vidas humanas y animales. De acuerdo con las estimaciones de los servicios meteorológicos de Canadá y Estados Unidos, se debe en gran medida a que el 2021 ha sido un año demasiado seco.

El alza en las temperaturas comienza cuando la presión atmosférica se eleva y empuja el aire caliente hacia el suelo. La cobertura de The New York Times enfatiza que, además, el viento y las nubes se minimizan, lo que provoca que el aire se vuelva sofocante, bajo un domo de calor que no le permite enfriarse.

Por esta razón, el calor parece estacionarse durante varios días. El problema, sin embargo, no termina en la asfixia que sentimos los seres humanos, ni en el exceso de sudor. Como el ambiente está particularmente seco, los incendios forestales en estados como California, Nuevo México y Oregon podrían estar a punto de estallar con singular violencia.

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¿Cuándo terminará la ola de calor?

En los meses siguientes es muy probable que no haya lluvias, lo que promueve que la ola de calor se estanque por más tiempo en los territorios afectados. Sin precipitaciones pronto, el Estado ya está tomando medidas de precaución para evitar que las consecuencias sean más graves para la población y la economía de esta región.

La prohibición de fogatas, estufas y cigarros encendidos al aire libre se encuentran entre algunas de las limitaciones que ya se están implementando a nivel nacional. Sin embargo, estas restricciones no atienden el problema de raíz. Por el contrario, frente a los efectos de crisis climática global, podrían entenderse más bien como paliativos que sólo los retrasan levemente.

Desde 1900 a la fecha, el planeta se ha calentado 1 grado Celsius. Al ritmo actual, las consecuencias cada vez están más presentes en los diversos ecosistemas terrestres, con tasas de mortalidad crecientes en las especies con las que cohabitamos. Parece ser que esta condición ya es extensible a los seres humanos, y que cada vez será más extrema, frecuente e intensa. Aunque la ola de calor sea pasajera, la emergencia climática definitivamente no lo es.

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