En el Día Mundial del Medio Ambiente, la ONU plantea medidas a largo plazo para solventar la crisis climática global con la restauración de ecosistemas.
La Organización de Naciones Unidas considera que el tiempo ya se nos acabó. El discurso que se tenía a principios de milenio de «dejar un mundo mejor para las generaciones futuras» sencillamente no es suficiente: ya estamos viviendo estragos potentes de la crisis climática global, a raíz de la pérdida de la diversidad biológica en la Tierra. En respuesta a la emergencia ecológica que el planeta padece recientemente, en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, la institución plantea un plan de trabajo conjunto en miras a un 2050 habitable.
Década de la Restauración: un esfuerzo global de cambio
Para la ONU, los objetivos a corto plazo sencillamente ya no son suficientes. Por el contrario, la premisa que persigue la institución de ahora en adelante es en miras a restaurar los ecosistemas que la actividad humana ha invadido de manera destructiva. Por esta razón, el 2021 marca un antes y un después en esta tendencia de impacto lacerante para la biodiversidad terrestre.
Para marcar la agenda del Día Mundial del Medio Ambiente, la ONU organizó por medio de su Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en México una serie de conferencias en línea. En ellas, se trataron los asuntos que atañen a los mandatarios de todo el mundo en materia medioambiental, en el marco de su proyecto global más reciente, la Década de la Restauración:
«Restaurar los ecosistemas significa prevenir, detener y revertir este daño, pasar de explotar la naturaleza a curarla. Para ello, y precisamente en este día, arrancará el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030), una misión global para revivir miles de millones de hectáreas, desde bosques hasta tierras de cultivo, desde la cima de las montañas hasta las profundidades del mar», detallan en su página oficial.
Qué tan complicado será rescatar y restaurar cada ecosistema, por supuesto, depende del daño que se le ha inflingido, y qué tan accesible es para los seres humanos. Haciendo un símil con el cuerpo humano, lo que la ONU pretende en los próximos diez años es sanar las zonas enfermas del planeta, de manera que recuperen su funcionalidad intrínseca. De esta forma, la pérdida de la diversidad descenderá significativamente, y el cambio climático se ralentizará de manera definitiva.
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Recuperar un área verde del tamaño de China
Dolores Barrientos, Representante en México del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, fue una de las participantes en el Webinar organizado por PNUMA México. Como especialista en finanzas y manejo de la crisis climática, le preocupa que, en los próximos diez años, el planeta debe de recuperar una cantidad notable de áreas verdes.
“En la próxima década, la humanidad debe de recuperar un aproximado de mil millones de hectáreas de ecosistemas, un área similar a la totalidad de China”, sentencia Barrientos. De otra manera, asegura la experta en su intervención durante la conferencia virtual, el futuro de la humanidad está en riesgo.
Por esta razón, postergar las soluciones para que las generaciones futuras arreglen el problema es un error en el que la raza humana ya no puede incurrir. La realidad es que la crisis climática global ya está incidiendo en la vida de las especies que habitamos el planeta. Gran parte de la respuesta se encuentra en la restauración de los ecosistemas perdidos que, si bien no regresarán a su estado original, podrán recuperar su funcionalidad para operar de manera natural.
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