Ya se va, pero sigues en tiempo de ver al “cometa del siglo” en los próximos días. Prepárate, que te decimos lo que debes considerar.
El “cometa del siglo”, o C/2023 A3 (Tsuchinshan–ATLAS), sobrevivió a su perihelio, es decir, a su punto de mayor cercanía posible al Sol, el 27 de septiembre. Este fin de semana, el sábado, específicamente, fue el turno de la Tierra, pues le tocó a nuestro planeta tener vistas excepcionales del cuerpo visitante, en razón de que este logró ubicarse lo más próximo, que su órbita le permite, al mundo que habitamos.
Si pensabas que toda oportunidad de ver al “cometa del siglo” había pasado ya, tenemos que decirte que no es así. Todavía los primeros tres días de la semana en curso se perfilan como buenas ocasiones para ver al objeto. Sí, del 14 al 16 de octubre, después del atardecer, el cielo seguirá mostrando este evento astronómico que es protagonizado por un cometa que desparecerá por los siguientes 80 mil años.
¿Cómo ver a Tsuchinshan-ATLAS durante los próximos días?
Las previsiones señalan a los territorios del norte del ecuador como los más favorecidos para ver, estas próximas horas, al “cometa del siglo”. Claro que, a diferencia del sábado, la observación ya no será tan sencilla a simple vista. Considerando lo anterior, el uso de instrumentos especializados, como prismáticos, te ayudará a que guardes un recuerdo más nítido del evento.
Te puede interesar: No es la Muralla China: La única construcción humana que se ve desde el espacio está en España
Finalmente, el “cometa del siglo” seguirá su camino durante las próximas semanas hasta desaparecer por completo en noviembre. Por lo mismo, te invitamos a que agendes una cita astronómica con el propósito de observar un evento que es sumamente especial.
Sigue leyendo:
Sputnik I: la oscura historia del «primer objeto en el espacio»
Por qué se envían peces al espacio
Por qué arde el Sol si en el espacio no hay oxígeno
El fin del mundo podría estar más cerca de lo que pensamos: ¿Deberíamos preocuparnos?
La NASA advierte: Estos lugares del mundo podrían ser inhabitables para 2050