Por qué el Sol no puede ser un agujero negro

Las estrellas tienen varios finales posibles, pero el del Sol no está ni un poco cerca de ser en forma de un agujero negro. Esta es la razón.

Los agujeros negros están entre los objetos astronómicos que más temor causan. Mucho de ese miedo se relaciona con el hecho de que su inmensa atracción gravitatoria no deja escapar ni a la luz. Además, se sabe que estas entidades cósmicas, sumamente pesadas, se forman cuando una estrella ha agotado todo su combustible. Entonces, podemos afirmar que algunos “colosos luminosos” terminarán sus días convertidos en esos puntos fríos y sombríos del Universo. A conocimiento de esto, surge la inquietud por saber si el Sol, la estrella de nuestro sistema planetario, será algún día un agujero negro. Esto es lo que sabemos.

El Sol no será un agujero negro

A comparación de nuestro planeta, el Sol es enorme, pues supera, hasta por 109 veces, el ancho de la Tierra. Sin embargo, aunque cueste creerlo, esta estrella, dentro de su categoría, es apenas de un tamaño medio.

Es importante mencionar, también, que el Sol ya cuenta una vida de más de 4 mil 500 millones de años. Pero, según las estimaciones de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), el “astro rey” tiene más tiempo por delante del que lleva existiendo. La agencia espacial calcula que la estrella puede durar 5 mil millones de años más.

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No obstante, todo a llega a su fin. Nuestra estrella, a pesar de parecer eterna, se “apagará” en algún momento. Cuando esa ocasión llegue, el Sol transmutará a otra cosa, pero, definitivamente, no será a un agujero negro.

Básicamente, los científicos saben que la estrella más conocida por la humanidad no tiene en su destino la forma de un agujero negro porque es demasiado pequeña para dar lugar a un objeto como ese.

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La NASA explica que el Sol tendría que ser 20 veces más masivo para acabar su vida como un agujero negro. De hecho, los expertos saben que la estrella tampoco será una supernova ni una estrella de neutrones.

¿Qué le ocurrirá a nuestra estrella?

El Sol, por sus dimensiones, será una enana blanca. Su camino hacia ese fin comenzará en 5 mil millones de años, cuando empiece a quedarse sin combustible. Sin embargo, antes de llegar a ese punto, le espera un periodo como gigante roja, una condición que elevará su temperatura y lo llevará a “engullir” a la Tierra y a otros planetas cercanos.