Consultamos a un especialista en el tema para responder qué son las enanas marrones, de dónde viene su energía y cuántas hay.
Más allá de cometas, asteroides, planetas, satélites naturales y estrellas, existen otros cuerpos celestes que ponen a prueba todo lo que se conoce hasta el momento. Ejemplos de ello son las enanas marrones, unos objetos cuyo estudio ha arrojado información de suma importancia para entender mejor la constitución estelar.
Para contestar las preguntas más básicas, con respecto a las enanas marrones, hablamos con el Dr. Jorge Fuentes Fernández, miembro del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Esto fue lo que dijo a National Geographic en Español.
¿Qué son las enanas marrones?
Una enana marrón es una estrella fallida, un eslabón a mitad de camino entre un planeta como Júpiter y una estrella pequeña. Para entender entonces qué son realmente las enanas marrones, hay que ver, primero, qué son las estrellas y los planetas.
Una estrella, por un lado, es una enorme bola de gas (principalmente hidrógeno y helio) cuya temperatura en el núcleo aumenta lo suficiente, por la presión de su propia gravedad, para prender la fusión nuclear del hidrógeno. Estas reacciones hacen brillar a la estrella en todas las longitudes de onda del espectro electromagnético, a la vez que detienen el colapso gravitatorio.
Te puede interesar: Planetas enanos: qué son, cuántos hay y por qué Plutón es uno de ellos
Por otro lado, un planeta gaseoso, como Júpiter, es una bola de gas (de nuevo: principalmente de hidrógeno y helio) que no capturó la suficiente masa para alcanzar la temperatura necesaria, con el fin de prender algún tipo de fusión nuclear, y que mantiene su forma gracias a la propia presión del gas que evita el colapso gravitatorio.
“Entonces, podemos decir que una enana marrón es una bola de gas de tamaño parecido al de Júpiter, aunque más masivo, en la que no se alcanza la temperatura suficiente para empezar a fusionar el helio, pero que puede llegar a fusionar deuterio (isótopo del hidrógeno poco abundante)”, apunta el Dr. Jorge Fuentes Fernández.
En una enana marrón, el colapso gravitatorio es detenido por la presión de generación de los electrones, fenómeno cuántico que impide que dos de ellos ocupen el mismo estado. A esto se le conoce, también, como principio de exclusión de Pauli.
Te puede interesar: Así podría ser el dramático fin de la Tierra (y, de paso, del sistema solar)
Típicamente, las enanas marrones tiene masas de entre 13 masas de Júpiter (masa a partir de la cual se puede alcanzar la temperatura para la fusión del deuterio) y 80 masas de Júpiter (masa a partir de la cual se puede alcanzar la temperatura para la fusión del hidrógeno).
¿Cómo generan energía?
“Si es que llega a suceder la fusión del deuterio, este se agota, por lo general, muy rápido y prácticamente no le da luz propia a la enana marrón. Normalmente, las enanas marrones generan energía térmica, al igual que cualquier cuerpo con temperatura interna, como nosotros y el resto de los animales. Producen muy poca luz visible y suelen ser observables en el infrarrojo” responde el experto.
¿Cuántas hay?
Dado que son pequeñas y no brillan en luz visible, las enanas marrones resultan muy difíciles de observar. Sin embargo, sabemos que en el universo es más fácil formar estrellas pequeñas que estrellas grandes, y que la mayoría de ellas son, de hecho, de las de menores proporciones. Se cree, entonces, que debe de haber más enanas marrones que estrellas mismas.
¿Cuál es la importancia de investigar a las enanas marrones?
“Las enanas marrones son cruciales para entender la formación estelar y la diferenciación entre estrellas y planetas gaseosos. Además, por su potencial numerosidad, pero también por su pequeño tamaño y temperaturas relativamente frías, podrían suponer una cantidad importante de la masa de las galaxias que no podemos detectar”, concluye el Dr. Jorge Fuentes Fernández.
Sigue leyendo:
Qué son las nebulosas planetarias y qué relación tienen con las estrellas
Estrellas fugaces, así son las “señales de los dioses y emisarias de la buena fortuna”
Así es Júpiter, el planeta más grande y antiguo del Sistema Solar
Este enorme asteroide ha pasado rozando la Tierra y más están en camino
VIDEO: Así se ve la superficie del Sol