En el municipio de Tulum y al sur de Playa del Carmen se localiza un edén natural ideal para disfrutar de las bondades de la naturaleza con todas las comodidades, para darte las vacaciones que mereces.
El parque acuático natural todo incluido Xel Há es una de las maravillas de México, hogar de uno de los acuarios naturales más grandes del mundo y de una abundante vida marina y de especies terrestres que pueden admirarse de cerca y en su hábitat.
Y también es un homenaje al verdadero descanso, a la salud y a la contemplación de la vida sin dejar de lado la diversión para todas las edades y para cualquier plan de viaje. Los mayas bautizaron esta región como Xel-Há, que significa “lugar donde nace el agua”.
¿Cuál es tu plan de viaje?
Desde avistar vida marina, hasta deslizarse en tobogán o lanzarse en tirolesa, Xel-Há ofrece actividades para todo tipo de viajeros, quienes además podrán disfrutar de deliciosos buffets de comida mexicana e internacional y bebidas insignia del parque. Sin importar tu plan, en Xel-Há encontrarás tu lugar.
Amantes de la aventura
Si lo tuyo es segregar adrenalina, entonces tienes que subir al Faro Mirador para, después de contemplar Xel-Há desde las alturas, descender en espiral de un tobogán de 30 metros de altura para caer en una poza de agua de mar.
La experiencia te dará ganas de más aventura, así que lo mejor será echarse un clavado a refrescantes aguas cristalinas desde la Piedra del Valor, entre hendiduras y cuerdas que significarán todo un reto.
Si no ha sido suficiente, entonces te toca hacer el Vuelo del Pelícano, columpiándose desde una cuerda para atreverte a soltarte hacia la Gruta de la Iguana.
Otra atracción que va a encantarte es la Trepachanga, en la que deberás cruzar a través de dos cuerdas paralelas suspendidas sobre el agua, ¿cómo anda tu equilibrio?
Y la diversión seguirá a la orden del día cuando te encuentres con las Salpichanga, que te llevará en la comodidad de una hamaca hacia las cristalinas aguas de Xel-Há durante un circuito de seis tirolesas y dos divertidos columpios.
Viajeros exploradores
A aquéllos viajeros asiduos a descubrir las maravillas de la naturaleza les encantará practicar Snorkel con todo y aletas en la Caleta de Xel-Há para admirar la vida marina y el caracol rosa, especie protegida que tiene su santuario en este paraíso.
Después querrán adentrarse en la Cueva Xel-Há, un cenote de caverna que impresiona por su luminosidad y acústica naturales. Pero la expedición no estará completa hasta adentrarse a la Gruta La Iguana y Cueva del Dorado, que se llenan con el agua dulce de los ríos subterráneos y se esconden en las profundidades de la selva.
Y no querrán dejar de visitar el Vivero, donde habita una gran cantidad de flora endémica y un sinfín de proyectos para la conservación de la vegetación de la reserva natural y de especies en peligro de extinción.
Para quienes buscan verdadero relax
Hay viajeros que consideran las vacaciones como sinónimo de descanso y se lo toman muy en serio. A ellos les encantará dejarse llevar por la corriente sobre una llanta flotante por el río de Xel-Há, que corre desde cuevas subterráneas hasta mezclarse con el mar.
Otra actividad muy relajante es nadar a través de la Caleta Xel-Há, una entrada del mar hacia el interior del continente y, al mismo tiempo, la desembocadura de varios canales de agua dulce que conforman el sistema de ríos subterráneos más largos del mundo. La habitan más de 400 especies de plantas, animales y peces de diferentes tamaños y colores.
Si el plan es adentrarse en escenarios sagrados para contemplar la maravilla de la naturaleza, su lugar estará en Paraíso y Aventura, los dos cenotes al interior del parque, escondidos entre senderos y esperando a ser contemplados en paz.
Disfruta con amigos
Xel-Há es un escenario ideal para las parejas, pues sus paisajes resultan perfectos para una escapada romántica y a solas, teniendo a la naturaleza como testigo de sus mejores momentos.
Algunos ejemplos de estos escenarios son la Bahía de los Caprichos, llena de rincones naturales encantadores, caminos poco recorridos, atajos y sorpresas; los Senderos por la Selva, donde encontrarás en tu camino estas reflexiones que promueven el respeto por nuestro planeta y la cultura de la conservación. Recorrer los manglares al inicio del río de Xel-Há es otra experiencia llena de romance y una gran oportunidad de capturar fotografías increíbles, especialmente si se dirigen desde el sendero peatonal hacia el río.
Si viajan en familia
Xel-Há es un parque pensado en todos los miembros de la familia, incluso en los más pequeños. Así que te tocará consentirlos en el Mundo de los Niños, donde disfrutarán de juegos de cuerdas y resbaladillas, chapoteadero y túneles mientras te relajas en el área de hamacas.
Más tarde, la familia entera podrá divertirse durante un Paseo en bicicleta siguiendo la ruta a través de la Tierra de Huh, que mide alrededor de un kilómetro y brinda en el camino avistamientos de coatíes, puercoespines y tzereques.
Volar un papalote en el área de El Faro es otra actividad imperdible en Xel-Há, solo es necesario reservar previamente en Atención al visitante.
Pero no pueden irse sin capturar la foto familiar más divertida, así que una silla gigante les estará esperando al finalizar el cruce del Puente Flotante, que divide el mar Caribe de la caleta y se une por secciones flotantes interconectadas, como eslabones sobre el agua.
¿Cómo puedo reservar?
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