Alguna vez el Muro de Berlín dividió a familias y amigos. Hoy, es un destino para aquellos que buscan recorrer la historia de la ciudad.
El sendero del Muro de Berlín se extiende por 160 kilómetros en una ruta que te lleva a recorrer la historia, naturaleza y vida urbana de la capital alemana.
Al Muro de Berlín se va en domingo
«Berlin Wall Trail» o «Sendero del Muro de Berlín» dictan los letreros dispuestos en el Mauerpark, un parque que formó parte del Muro de Berlín. En domingo, los turistas y locales se congregan en el sitio, que además cuenta con un famoso mercado de pulgas, puestos de comida y música en vivo.
A ratos, los grafiteros trabajan en imprimir color a los restos del muro, que ahora son testigo de un típico día dominguero. La nostálgica y macabra imagen retratada por los documentales de historia queda relegada al pasado, en su lugar, la imagen es de libertad, ocio y alegría.
La caída del Muro de Berlín
Se levantó en 1961 como una estructura y un símbolo de división y opresión del pueblo alemán. Así se mantuvo por tres décadas bajo el régimen comunista de la República Democrática de Alemania.
Fue el 9 de noviembre de 1989 que los ciudadanos de Berlín obtuvieron la victoria, y dicha barrera se rompió.
En los días siguientes se difundieron imágenes de los ciudadanos berlineses que acudían al muro con martillos y herramientas similares para tumbarlo. Nadie los organizó, simplemente sucedió.
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Después de la caída del Muro de Berlín
Tras la reunificación de Alemania y el fin de la Guerra Fría se comenzó a percibir lo que quedaba del muro como un símbolo de memoria colectiva.
Desde su caída, el muro ha sido objeto de proyectos que buscan preservar y generar espacios de consciencia sobre la histórica división.
El origen del Sendero del Muro de Berlín
El proyecto de hacer del muro una ruta para ciclistas y peatones, fue impulsado por Michael Cramer en los años noventa. Cramer era miembro del Partido Verde de Berlín y ya había recorrido los 160 kilómetros en bicicleta.
En aquel momento, Cramer se enfrentó a la oposición de los medios y los políticos, que buscaban remover cualquier indicio del Muro de Berlín… lo cual sucedió hasta cierta parte.
Sin embargo, si no hubiera sido por Cramer y el activismo que realizó por conservar esta memoria histórica, no quedaría nada del muro. Ahora el Muro de Berlín representa un «sendero viviente» de la historia de este gran país.
Desarrollo del Sendero de Berlín
En 2001, una década después de la propuesta original, el Parlamento de Berlín apoyo la idea de Cramer.
Así, en este año que recibió al milenio, se inauguró la primera sección del sendero, a la cual se han ido agregando tramos.
Hoy, el Sendero de Berlín o Mauerweg, atraviesa el centro de Berlín y zonas rurales que lo circundan. A través de esta ruta podrás encontrar sitios históricos, como las tristemente célebres «franjas de la muerte». Estas zonas superaban los 90 metros de ancho, y eran donde los ciudadanos que buscaban cruzar se topaban con alambres de púas, torres de vigilancia y trampas.
Detalles sobre el Sendero
Durante la pandemia del Covid-19, un grupo de boliche callejero comenzó un proyecto de jugar a los bolos a lo largo de la ruta. Así mismo, el sendero se ha transformado en sede de una carrera de 160 kilómetros (para maratonistas).
A lo largo de los años, el gobierno ha invertido en la rehabilitación de trechos, señalización, sistemas de orientación e inclusive un túnel subterráneo.
Definitivamente, este sendero se ha transformado en un símbolo de cómo podemos navegar cicatrices del pasado, manifestadas a través de lugares históricos.
Este texto fue escrito por Aura Moreno Rosales, periodista de profesión y lectora suspirante. Le gusta trotar por el mundo, sobre todo si es a través de las palabras. Colabora como redactora en National Geographic en Español.
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