Ashenda es un festival que se celebra en la región de Tigray, al norte de Etiopía. La semana del 15 agosto las calles se engalanan con multitudes de mujeres jóvenes y niñas. Suelen ataviarse con ropa nueva y colorida. Llenan sus cuerpos de joyería y sus alrededores de música y cantos.
Originalmente el festival celebraba la asunción de la Virgen María. Sin embargo su significado ha cambiado a través de los años. Cada celebración, las jóvenes que participan en el festival discuten entre ellas cómo celebrarlo. Abadi Desta, funcionario del Departamento de Cultura y Turismo, afirma que tiene un origen más remoto:
“Ashenda se ha celebrado desde la era del Reino de Axum, incluso antes del S.IV d.C., antes de que el cristianismo se introdujera en Etiopía,” dice el experto en relaciones públicas. “Después de la introducción del cristianismo, la celebración tomó dimensiones religiosas y fue marcada en relación con la temporada de ayuno de dos semanas en memoria de la Virgen María y su Asunción”
La caravana de mujeres jóvenes se divide en grupos y van, casa por casa, llevando su música a cada habitante. Por tradición, se acostumbra que las personas les den comida, dinero, bebidas y lo que sea necesario para continuar con su jornada de júbilo. Cada integrante de la comunidad forma parte de esta fiesta colectiva.
Desde finales de 2020, el norte de Etiopía vive un conflicto armado. Los enfrentamientos empezaron cuando el Frente Popular de Liberación realizó elecciones no autorizadas por el gobierno federal. Esto, aunado a un ataque a un cuartel militar, desató la guerra.
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Ahora, a casi dos años del conflicto, la región de Tigray ha sido escenario de terribles crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra. Desde asesinatos, desapariciones forzadas y tortura hasta violaciones y esclavitud sexual, la población de Tigray padece las consecuencias de la lucha armada.
En 2021, las jóvenes que celebraron en Ashenda, decidieron darle un nuevo significado a su festival. Si bien la celebración cada año se centra en la sororidad y complicidad femenina, el año pasado fue sobre la resistencia; una protesta en contra a las violencias causadas por la guerra. Las intenciones de unidad, desafío y libertad comunitaria permearon en cada participante.
Ashenda es un festival hecho para celebrar a las mujeres jóvenes, la fuerza femenina y la resistencia. Su postura de gozo en contraste con los crímenes atroces demuestra que la violencia cometida hacia ellas no define su historia.
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