En Holanda no sólo se felicita a la persona que cumple años.
Todo el mundo suele cumplir años, algo que no requiere mucho esfuerzo. Por esta razón, se podría considerar como algo curioso que la gente se felicite con motivo de esta fiesta. Sin embargo, es imposible imaginarse la vida sin esta costumbre. En Holanda no solo se felicita a la persona que cumple años, sino también a su familia.
Por ejemplo, si el cumpleañero invita a los amigos a su casa para la celebración, éstos no solo le saludan diciendo "¡felicidades!", sino que también le dan la mano a la esposa del anfitrión, por ejemplo, y le dicen: "Felicidades por el cumpleaños de tu esposo".
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