Un claro de bosque demuestra que hace 125,000 años, los neandertales ya utilizaban el fuego para modificar los ecosistemas a su conveniencia.
A partir de los rastros de carbón dejados por incendios y el análisis de las especies de plantas conservadas en un claro de bosque en el centro de Alemania, un equipo encabezado por la Universidad de Leiden sugiere que no fueron los Homo sapiens, sino los neandertales, la primera especie humana que alteró el ecosistema a su conveniencia.
El hallazgo ocurrió en la zona arqueológica de Neumark-Nord, en el centro de Alemania, un área que formaba parte de un espeso bosque caducifolio que se extendía desde los Países Bajos hasta la actual Polonia.
Tras comparar el área con las regiones limítrofes donde no habitaban neandertales, el equipo concluyó que Neumark-Nord posee una densidad vegetal menor respecto a las áreas vecinas. Este hallazgo, aunado al descubrimiento de evidencias de actividad humana, como sacrificios de animales con herramientas de piedra y restos de carbón, sugiere que el área fue transformada por los homínidos.
“Entre otras cosas, encontramos los restos de cientos de animales sacrificados, rodeados de numerosas herramientas de piedra y una gran cantidad de restos de carbón», explica Wil Roebroeks, profesor de arqueología de la Universidad de Leiden.
Hace más de 125,000 años, Neumark-Nord era una región boscosa con lagos donde habitaban animales utilizados para su aprovechamiento como ganado, caballos y ciervos. En el sitio también coexistían leones, hienas y hasta elefantes; sin embargo, en un periodo de tiempo relativamente corto el espeso bosque dio paso a un terreno abierto tras la llegada de estos homínidos a la región, especialmente debido a la acción del fuego.
“La pregunta es si el área antes boscosa se convirtió en una zona abierta y despejada debido a la llegada de los homínidos o bien, si llegaron aquí porque era una zona abierta. Hemos encontrado suficiente evidencia para concluir que los cazadores-recolectores mantuvieron el área abierta por lo menos durante 2,000 años”, explican los autores en un comunicado.
A pesar de que se trataba de cazadores-recolectores, es probable que los neandertales habitaran Neumark-Nord durante un mayor periodo que otras regiones gracias a su disponibilidad de agua, refugio y grandes animales qué cazar cuando se acercaban a la orilla de los lagos, una teoría que explica el empeño de estos humanos antiguos en transformar su entorno natural.
Y aunque el equipo ha hallado rastros de carbón que coinciden con la llegada de los neandertales al área que sugieren incendios provocados por homínidos cerca de los lagos, aún no es posible descartar la hipótesis de que el fuego apareció naturalmente y dio paso a un incendio forestal.
Un estudio previo del mismo equipo concluyó que el conocimiento sobre el fuego ya era compartido por homínidos hace al menos 400,000 años. De ahí que Roebroeks considere que no sería sorpresivo confirmar en investigaciones posteriores que el impacto humano en los ecosistemas es mucho más antiguo de lo que se creía hasta ahora.
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