Desnudas por arte

Como un medio para ganarse la vida, jóvenes posan desnudas y con el cuerpo pintado en Nueva York, mientras las autoridades del lugar planean una forma de limitarlas.

Lourdes lleva bien sujeto el fajo de billetes amarrado a su mano derecha mientras saluda sonriente a los turistas que fotografían sus pechos pintados con rayas y estrellas. Y es que el trabajo de esta joven latina de 21 años no es otro que posar para quien lo desee, desde primera hora de la tarde y vestida tan sólo con un calzón, en la Times Square de Nueva York.

Lourdes se gana la vida como "desnuda", la palabra con la que se conoce a estas mujeres que posan sin ropa para todo tipo de curiosos. "¿Una propinita?", pregunta amablemente. Y si todo va bien, alguien le entrega un billete de cinco dólares.

Hace apenas unas semanas, Lourdes empezó a ser la única "desnuda" en el lugar.

Según datos de la asociación de empresarios Times Square Alliance, eran diariamente en torno a diez las mujeres -en su mayoría latinas- que competían aquí por llamar la atención de los turistas vestidas de heroínas de cómic. Hasta que llegaron las quejas.

Ahora, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, se ha propuesto acabar con el problema. Sostiene que lo que hacen estas mujeres está mal y que su trabajo debería estar regulado. "No me gusta la situación en Times Square. La combatiremos de forma agresiva", dijo sin matizar a qué se refería. Y es que la actual legislación hace que sea difícil limitar el trabajo de estas mujeres.

¿El motivo? Mientras se considere una representación artística, en Nueva York es legal mostrarse en público en topless. No obstante, según el mandatario, las "desnudas" no son artistas, sino que sólo buscan hacer negocio. Y eso deja más opciones para que las autoridades puedan tomar medidas.

De Blasio cuenta con el apoyo del gobernador Andrew Cuomo y la Times Square Alliance. Y es que según afirma el presidente de ésta, Tim Topkins, en los últimos tiempos ha habido una y otra vez quejas sobre el comportamiento de estas mujeres.

Lourdes, oriunda de Puerto Rico, no entiende a qué viene tanto revuelo. «No soy vulgar», afirma. «La gente no me toca. Utilizo mi cuerpo como lienzo para mostrar a todos lo que significa ser libre», una palabra que lleva escrita en mayúsculas en el brazo.

Según la joven "desnuda", la gente debería ser más abierta y no escandalizarse tanto. "Que una mujer enseñe su cuerpo no es algo tabú. Esto es América, la tierra de la libertad", sostiene. Eso sí, reconoce que posa por dinero: está estudiando, y con ello se costea las tasas.

Una "desnuda" puede llegar a ganar hasta 300 dólares por un día de trabajo en Times Square. Según Mey Ovalles, una joven venezolana que posa desde abril en la plaza. Por una fotografía se embolsa entre cinco y 20 dólares. Tampoco a ella le parece un empleo molesto: afirma que le divierte "y a la gente le gusta".

Lourdes declina revelar cuánto gana ella en una tarde. No es mucho, señala. En el fajo amarrado a su mano podría haber unos 50 dólares, quizá 100, pero en cualquier caso, resultan suficientes para que esta puertorriqueña quiera quedarse. Al menos, hasta que una ley lo prohíba. Y al preguntarle si se siente segura estando semidesnuda, contesta sonriente que "sí". "Porque no hago nada ilegal".