Las autoridades comprobaron la autenticidad de las 75 piezas, que pertenecieron a altos mandos del régimen nazi.
Mientras buscaban piezas de arte chinas de contrabando, autoridades argentinas encontraron un tesoro nazi en una habitación secreta de una biblioteca.
De acuerdo a la policía de este país, desde octubre seguían el rastro de obras de arte incluidas en la Lista Roja de Objetos Culturales Chinos de la Unesco. La investigación los había guiado a localizar las piezas en una galería y un almacén, junto con otras obras de origen japonés y egipcio. ?Las encontramos casi de casualidad, estábamos buscando otra cosa? señaló Gustavo Roncaglia, jefe de la policía federal argentina en entrevista para el diario El País.
Al realizar la inspección del domicilio del coleccionista en donde se hallaron las piezas del tesoro nazi, el cual se ubica en Béccar, un suburbio de clase media alta al norte de la capital argentina, uno de los agentes de la policía sintió curiosidad por el librero de la habitación, y como en una escena de una película de misterio, al moverla reveló una habitación secreta en la que se encontraban en exhibición las 75 piezas de la Alemania nazi.
Este es el mayor hallazgo de objetos nazis descubiertos en Argentina hasta la fecha. Entre las piezas halladas se encuentran juguetes, binoculares, armas, instrumentos musicales, un busto del mismo Adolf Hitler e instrumentos de medicina escalofriantes que de acuerdo a los expertos consultados por las autoridades argentinas, fueron usados por Josef Mengele, el llamado Ángel de la Muerte.
Las autoridades de Argentina han comprobado la autenticidad de las piezas, e infieren que otra pista para descatar que son falsas es que fueron encontradas en una zona cercana a donde habitaron Mengele y Adolf Eichmann, el encargado de transportar a los judíos a los campos de concentración y quien ordenaba los asesinatos masivos.
¿Cómo llegó este ?tesoro? a Argentina?
Cuando Alemania perdió la guerra, muchos altos mandos del régimen nazi huyeron a América del Sur, en especial a Argentina, es por eso que los investigadores infieren que estas piezas fueron traídas a Argentina por los mismos jerarcas nazis.
Josef Mengele cambió la Medicina por la carpintería y otros negocios, solicitó la ciudadanía argentina y se cambió el nombre a José Mengele y nunca fue aprehendido. Por su parte, Adolf Eichmann vivió en Argentina con el nombre de Ricardo Klement, hasta que fue secuestrado y llevado al Estado de Israel por el Mossad, donde fue sometido a juicio y sentenciado a muerte.
Respecto al hallazgo de este tesoro nazi, Ariel Cohen Sabban, presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas expresó que ?Es la prueba irrefutable de que después de la Segunda Guerra Mundial se abrieron las puertas para que jerarcas nazis entraran en Argentina?.
Las 75 piezas encontradas serán exhibidas en el Museo del Holocausto de Buenos Aires.