Los imperios han sido parte fundamental de la historia por su relevancia sociopolítica, siendo importantes para el mundo incluso actualmente.
Desde la creación de las primeras sociedades, la ambición humana llevó a los grandes emperadores a expandir sus territorios exponencialmente. Los imperios son definidos por Britannica como una entidad política que ejerce control sobre un territorio de gran extensión. Estos han sido parte primordial en los sucesos más importantes de la historia.
Los líderes políticos y militares imperialistas, como Alejandro Magno o Trajano, fueron la cabeza de los territorios más poderosos y consecuentemente más influyentes de la humanidad. Actualmente, sistemas y conceptos arraigados a los antiguos imperios, siguen utilizándose para definir las políticas globales.
A continuación enlistamos solo algunos de los más poderosos e influyentes en la historia.
El Imperio de Egipto
Según la Enciclopedia de Historia Mundial, el antiguo Imperio egipcio, es uno de los primeros en la historia, pues data del tercer milenio a.C. Además, importantes registros de disciplinas aún vigentes, han sido asociadas al desarrollo del imperio. Por ejemplo, los antiguos egipcios escribieron algunos de los primeros textos médicos para el tratamiento de distintas enfermedades.
Por otra parte, las Pirámides de Giza, no solo son muestra del poder arquitectónico y artístico de la época. Hoy en día, son el principal atractivo turístico de Egipto y sobre todo, son evidencia suficiente para demostrar las capacidades tecnológicas de las antiguas civilizaciones.
Su territorio, además de estar posicionado en el actual Egipto, se extendió desde Siria hasta Sudán, ocupando parte importante de África y el Medio Oriente. Eventualmente, la historia de Egipto, junto con su interesante mitología, han convertido al imperio en uno de los más atractivos de la humanidad.
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El Imperio de Alejandro Magno
A pesar de ser tan joven, el rey macedonio Alejandro Magno, hizo de su imperio uno de los más grandes y poderosos de la historia. Su territorio, iba desde Grecia y Macedonia hasta la India, pues en su recorrido como conquistador logró derrotar a otros imperios, entre ellos al -también poderoso- Imperio Persa.
«La historia ha tenido su cuota de líderes hábiles: Julio César, Aníbal y, más tarde, Napoleón. Sin embargo, estos tres hombres deben rendir homenaje a un solo individuo y a su ejército. Alejandro Magno conquistó la mayor parte del mundo conocido de su época», menciona la Enciclopedia de Historia Mundial.
Eventualmente, Alejandro falleció a los 32 años en el siglo III a.C. y no pudo extender aún más su imperio. Sin embargo, su legado siguió siendo importante para el desarrollo de la historia en su territorio y el mundo. Según la Enciclopedia de Historia Mundial, es el principal responsable del esparcimiento de la cultura griega y el periodo helenístico.
El Imperio mongol
Situado desde Europa del este, hasta las costas japonesas, el Imperio mongol es considerado el segundo más grande en la historia. Gengis Kan lo fundó en 1206 y hasta decenas de años después de su muerte en 1227, su imperio siguió prosperando.
Según Britannica, una de las principales influencias del Imperio mongol, fue en China, pues durante más de un siglo dominó su enorme territorio. Esto provocó que el arte y la literatura china, mundialmente reconocidos, tomaran un rumbo marcado por la conquista mongol
Finalmente, China acabó con el imperio. El monje Zhu Chongba, terminó con el dominio mongol en 1368 e instauró la dinastia Ming que eventualmente se convertiría en otra importante potencia política.
El Imperio otomano
Aunque el inicio del Imperio otomano data desde antes del año 1300, su auge comenzó tras la conquista de Constantinopla en 1453, cuando acabaron con el Imperio bizantino. Además de ser considerado uno de los imperios más grandes, también es uno de los más prologandos.
«En su apogeo en los siglos XVI y XVII, el imperio controló Anatolia, el suroeste europeo, Grecia continental, los Balcanes, partes del norte de Irak, Azerbaiyán, Siria, Palestina, una porción de la Península Arábiga, Egipto y la franja del norte de África, además de las islas de Rodas, Chipre y Creta», según la Enciclopedia de Historia Mundial.
Después de seis siglos vigente, el Imperio otomano acabó en 1922, tras su involucración Primera Guerra Mundial.
El Imperio Británico
Reconocido por ser el más grande de los imperios en la historia, el Imperio británico llegó a ocupar territorios en los seis continentes. Según Britannica, el Reino Unido empezó a establecer colonias más allá de los mares en el siglo XVI, compitiendo contra las ambiciones territoriales de Francia.
«El Imperio Británico fue un sistema mundial de dependencias, que incluía colonias, protectorados y otros territorios, que a lo largo de aproximadamente tres siglos fueron sometidos a la soberanía de la corona de Gran Bretaña y la administración del gobierno británico», menciona Britannica.
Actualmente la corona británica sigue teniendo algunas colonias (Anguila, Bermudas, Gibraltar, Islas Caimán, Islas Malvinas, Islas Turcas y Caicos, etc) y muchos países mundialmente reconocidos, siguen respondiendo a ella (Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Jamaica, entre otros).
Este texto fue escrito por Iñaki Arriola, periodista mexicano interesado en la cultura urbana, el arte y su convivencia con la naturaleza. Colabora como redactor en National Geographic en Español.
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