Un nuevo sitio maya, sobre un cerro en la selva de Campeche, ha sido revelado. Este es uno de los vestigios de las últimas comunidades antiguas que ocuparon la región.
Una extensa área de la selva de Campeche, conocida por sus humedales y elevaciones con terrenos rocosos, ha revelado antiguas construcciones mayas que alguna vez albergaron comunidades. Los arqueólogos documentaron en sitio maya una pirámide, un centro cívico-ceremonial y una estructura de juego de pelota en zonas de la Reserva de la Biosfera Balam Kú.
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Una pirámide sobre un cerro
Lo primero con lo que se encontraron los investigadores fueron asentamientos de tamaño modesto y pocos edificios mayores. «Prácticamente no hay muros en pie ni se observa decoración arquitectónica; y los monumentos son escasos, pequeños y sin grabados», señalaron en un comunicado. La ocupación de esta zona ocurrió entre los periodos Clásico Tardío y Terminal (600-1000 d.C.), como resultado de migraciones tardías hacia el área.
Un sorprendente hallazgo se produjo después en un grupo de estructuras situado a 5 kilómetros al noroeste de Nadzcaan, un sitio descubierto en la década de 1990. En lo alto de un cerro prominente, modificado mediante nivelaciones, se descubrió una plaza principal de planta irregular, rodeada por estructuras alargadas y coronada por una pirámide en su lado poniente.
Junto a la esquina noreste del conjunto, los arqueólogos también encontraron un canal que drenaba el agua acumulada en la plaza, asociado a una etapa temprana, aunque posteriormente fue tapado durante remodelaciones.
«En su plaza principal sobresale una pirámide de 16 metros de alto, en cuya cumbre se halló una ofrenda, de la cual se recuperaron restos cerámicos, un fragmento que representa la pata de un animal, quizá tepezcuintle o armadillo, y una punta bifacial de pedernal», informó en junio de este año el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los investigadores inspeccionaron otro sitio que, aunque no es extenso, creen que debió tener una importancia sociopolítica considerable. El centro cívico-ceremonial de este posee edificios de hasta 13 metros de altura.
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Un juego de pelota con una cámara oculta
En otro sector, también encontraron un juego de pelota que incluye una construcción más antigua oculta bajo su superficie, la cual podría datar del periodo Clásico Temprano (200-600 d.C.). Esta estructura está recubierta con una capa de estuco que aún conserva restos de pintura.
Estos sitios datan del periodo Posclásico Tardío (1250-1524 d.C.), y confirman la presencia de grupos humanos durante los siglos previos a la llegada de los españoles. Además, reflejan la continuidad de estas comunidades tras el declive de las principales entidades políticas mayas en las Tierras Bajas Centrales hacia finales del periodo Clásico (200-600 d.C.).
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