La Gran Pirámide de Guiza ocultó durante mucho tiempo un dato sorprendente de su arquitectura: la existencia de sus ocho lados.
La Gran Pirámide de Guiza, construida hace más de 4.500 años, es uno de los monumentos más icónicos del mundo antiguo y un ejemplo destacado de la ingeniería de los antiguos egipcios. A lo largo de la historia, ha sido fotografiada por innumerables personas desde distintos ángulos y perspectivas. Sin embargo, pocos han observado que la emblemática pirámide de Guiza en realidad posee ocho lados y no cuatro, como aparenta a simple vista.
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Los ocho lados de la Gran Pirámide de Guiza
La Gran pirámide de Guiza forma parte de las siete maravillas del mundo antiguo y es la única que se mantiene en pie. Aunque su estructura ha revelado mucha información sobre su historia, aún guarda secretos sorprendentes. Uno de ellos fue revelado en 2023 por el investigador japonés Akio Kat, quien descubrió que la pirámide no tiene cuatro lados. Este hallazgo cambió la percepción que se tenía sobre la arquitectura de este monumento.
Akio Kat detectó una ligera concavidad en cada una de las caras de la pirámide. Estas divisiones, casi imperceptibles a simple vista, crean un efecto de ocho lados en lugar de los cuatro tradicionales que se observan desde lejos. Este fenómeno es más evidente al amanecer y al atardecer, cuando la luz del sol proyecta sombras que revelan la verdadera forma de la pirámide.
“La Gran Pirámide tiene la característica de concavidad, ya que cada una de sus cuatro lados está ligeramente hundido a lo largo de su línea central. Aplicando la geometría a un plano inclinado, demostramos que esta concavidad podría derivarse de su estructura interna de hiladas inclinadas hacia adentro suavemente hacia el centro de cada hilada”, explicó Akio Kat en su artículo publicado en la revista Archaeologycal Discovery.
Esta característica no es una ilusión óptica, aunque no se percibe de inmediato en las fotografías. Tiene un trasfondo que ha contribuido a que la pirámide permanezca en pie durante miles de años. “Las capas inclinadas junto con la base reforzada fueron necesarias para la estabilidad a largo plazo de la pirámide contra las severas fuerzas naturales, como la alta compresión gravitacional, los terremotos y las tormentas de lluvia”, señala el matemático.
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Otras pirámides también tienen ocho lados
Las concavidades de la pirámide cumplían funciones importantes, como estabilizar la estructura. Posiblemente también tenían fines ceremoniales vinculados al culto solar, aunque de esto aún no hay certeza. Su diseño octagonal, aunque conocido y observado desde hace tiempo, evidencia la avanzada precisión arquitectónica de los antiguos egipcios.
Oras investigaciones han revelado que las pirámides de Kefrén y Micerino podrían compartir características similares. Al igual que la Gran Pirámide de Guiza, estas construcciones poseen ocho lados y no cuatro, como solíamos creer.
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