El Monstruo de la Tierra, la joya olmeca de hace 2,500 años, regresa a casa después de décadas de una estancia incómoda en Estados Unidos.
El Monstruo de la Tierra tiene las fauces abiertas en una circunferencia perfecta. Es un bajorrelieve con al menos 2 mil 500 años de antigüedad, que algún artesano olmeca diseñó como una pieza de culto. Como la cultura más antigua de Mesoamérica, durante miles de años desarrollaron una relación íntima entre el cosmos, la ciencia y la religión. Esta pieza ‘magnífica’, como la describe el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México es producto de ese entendimiento del Universo.
Aunque ésta es una pieza invaluable de casi 2 metros de alto, permaneció durante décadas en Nueva York, Estados Unidos. Oficialmente conocido como Monumento 9 de Chalcatzingo, ha sido codiciado por ambas naciones. Después de un ir y venir incansable, las autoridades mexicanas recibirán de regreso al Monstruo de la Tierra. Esto es lo que sabemos al respecto.
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Un peregrinar forzado en Estados Unidos
Olmeca se traduce literalmente como ‘habitante de la región del hule‘. Esta cultura floreció al sureste de México, específicamente en los estados de Veracruz y al oeste de Tabasco. Típicamente, se les conoce por las cabezas colosales que sembraron en la selva. Aunque estas piezas monumentales son las más representativas de la civilización, hay ejemplos de otros objetos ceremoniales y decorativos que también destacan.
El Monstruo de la Tierra consolida el desarrollo estético, artístico y religioso que alcanzaron los olmecas en aquel pasado remoto. Lo más probable es que haya servido como ornamento para algún templo en la región. De ser un objeto de culto inserto en un contexto sagrado, de alguna manera llegó hasta Manhattan de contrabando.
A finales de marzo de 2023, la pieza fue descubierta por la Unidad de Tráfico de Antigüedades de Manhattan. Sin embargo, hoy mismo se encuentra en Denver, Colorado, donde se realizará la entrega formal a las autoridades mexicanas. Desde ahí, la entregarán a un avión mandado por la Defensa Nacional del país.
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El Monstruo de la Tierra regresa a casa
“Ha sido una lucha de meses para pugnar por el regreso de esta magnífica pieza”, declaró el antropólogo Diego Prieto, director del INAH, en una conferencia con el presidente de México. No sólo eso: parece ser que la zona de donde se extrajo el Monstruo de la Tierra rebosa en bajorrelieves similares, igualmente complejos.
México celebra el retorno de la pieza por la profunda carga simbólica y pictórica que lleva consigo. De acuerdo con las autoridades, arroja luz sobre la cosmovisión de los olmecas, que se considera la madre de las culturas en México. Por ejemplo, las fauces abiertas de par en par representan las puertas del Inframundo, explica el arqueólogo Mario Córdova Tello.
No se sabe con exactitud cuándo fue que llegó a Estados Unidos. Sin embargo, la revista American Antiquity habló de su presencia en el país en 1968. Por lo cual, se piensa que la pieza lleva fuera de México desde mediados del siglo XX. A pesar de todo, después de décadas de esfuerzos, el Monstruo de la Tierra vuelve a casa.
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