La sociedad de Río Bec construyó un sistema sustentable y de autoconsumo. Sin reyes ni jerarquías, este lugar floreció en la selva de lo que ahora es el sur de Campeche.
Muy cerca de lo que ahora es una pequeña comunidad en Calakmul, Campeche, que apenas rebasa los 400 habitantes, grupos de antiguos mayas establecieron una sociedad con una organización sociopolítica distinta, sin reyes ni jerarquías. El pasado histórico de las poco exploradas ruinas del sitio arqueológico de Río Bec, ubicada en la selva del sureste de México, desafía lo que fueron las antiguas ciudades de este civilización.
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Río Bec, una sociedad maya entre iguales
Los hallazgos en este sitio hacen suponer a los arqueólogos que en ese lugar floreció una sociedad en la que imperó una organización política distinta, en comparación con otros lugares de los asentamientos maya como Tikal, Palenque, Copán o Cobá. «Un sistema dominado por varias casas nobles de las cuales ninguna habría logrado -o buscado- imponerse a las demás», escribieron hace casi dos décadas expertos franceses en la revista Arqueología Mexicana.
Excavaciones recientes en Río Bec confirmó que este sitio estuvo compuesto por asentamiento diverso y autosuficiente, que misteriosamente desapareció al inicio del primer milenio de nuestra era. Los antiguos mayas de este lugar desarrollaron parcelas sostenibles con largos canales para agua de lluvia y un moderno sistema presas para retener agua y tierra, esta última usada para los cultivos en sitios donde predominaba el suelo de piedra porosa.
“Este sitio es muy particular. Era una sociedad diferente, que se organizaba por barrios. Y en cada barrio había una casa grande monumental o dos, y luego casas más pequeñas, pero lo único es que todas tenían amplias parcelas agrícolas alrededor”, explicó a El País Eva Lemonnier, directora del proyecto Campesinos y reyes. Formas alternas de Gobierno y de uso del suelo en Río Bec.
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Un sitio que nunca fue conquistado
Las exploraciones con tecnología láser han encontrado numerosos asentamientos dispersos, más de 70 conjuntos de casas separadas por 200 a 500 metros. Cada unidad en Río Bec estaba dirigida por una familia que habitaban monumentales edificios con techos abovedados y compartía tierras con sus parientes.
Esta sociedad maya permaneció sin ser conquistada por otros reinos, como el de los Kaan, en su apogeo y dominio de Calakmul. Los investigadores creen que su aparente debilidad pudo ser su mejor defensa. Al carecer de un rey y estar habitado por grupos sociales considerados inferiores y dispersos, no representaban amenaza para otros dominios. Esta situación permitió el desarrollo de un sistema parcelario sostenible.
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