El ahuehuete se convirtió en el árbol nacional de México gracias a su belleza, esplendor, tamaño y por ser testigo de la historia de este país
En 1921, dentro del marco conmemorativo por la consumación de la Independencia de México, la Escuela Nacional Forestal convocó a una votación para elegir al árbol nacional. La sociedad propuso a 21 especies diferentes. El ganador fue el ahuehuete. Además de considerársele un digno representante por su belleza, dimensiones y longevidad, hoy se sabe que dicha planta es antiguo testigo de la historia del país.
El nombre de este árbol, derivado del náhuatl (ahuehuetl), significa “viejo del agua”. Ahuehuete es, entonces, la forma más conocida de llamarlo. Sin embargo, existen muchas otras que también provienen de varias lenguas nativas del territorio mexicano. Sauce llorón, sabino o ciprés de Moctezuma son algunas maneras más en las que se le conoce.
Ejemplo del ahuehuete siendo parte de la historia de México es lo ocurrido el 10 de julio de 1520, cuando Hernán Cortés lloró su derrota. El reconocido “Árbol de la noche triste” corresponde a un miembro de esta especie. Un par de décadas atrás, en 1460, Nezahualcóyotl plantó uno de estos árboles en el actual bosque de Chapultepec, espacio dedicado al descanso de los gobernantes.
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Otro Ahuehuete de gran fama es el “El árbol del Tule”, ejemplar ubicado en Santa María del Tule, Oaxaca. En este caso específico se tiene a un miembro de los árboles más longevos, pues se dice que éste cuenta con hasta 2 mil años de vida. Por si fuera poco, su tronco, de 40 metros de diámetro, hace a éste el árbol más ancho de su especie.
Ahuehuete, el viejo que crece a la orilla de los ríos
La base de datos Naturalista indica que el ahuehuete (Taxodium mucronatum) es una especie arbórea perteneciente a la familia de las cupresáceas. Estos árboles tienen un origen que se remonta a la Era Mesozoica, cuando las coníferas dominaban el paisaje de los bosques primitivos.
Los ahuehuetes se caracterizan por su considerable altura, la cual puede alcanzar los 40 metros. El grosor de los troncos oscila, por lo general, entre los 2 y 14. La fuente recién citada menciona que estos árboles son frondosos, tienen hojas ordenadas en espiral y producen semillas todo el año, sobre todo en agosto y noviembre.
Aunque el mayor territorio abarcado por el ahuehuete es el mexicano, la especie se halla en zonas del sur de Texas y norte de Guatemala. Conforme a lo publicado por el Instituto de Ecología (INECOL), este árbol nacional, en México, se distribuye a lo largo de 25 estados que comprenden el norte, occidente y oriente de la República.
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El ahuehuete, de acuerdo a su nombre náhuatl, es un ser longevo que tiende proliferar junto a cuerpos de agua. Su hábitat, en consecuencia, está en donde hay abundancia de este elemento. Mantos freáticos superficiales, nacimientos de agua o las veras de los ríos son algunos ejemplos, según la Universidad Veracruzana.
Usos
Una de las virtudes del ahuehuete es su resistencia, la que le permite sobrevivir a sequías, plagas y enfermedades. Además, el árbol es centro de propiedades medicinales, ya que se hacen infusiones con él, mientras que su resina es utilizada como cicatrizante.
La madera del ahuehuete, al ser ligera, suave y resistente a la humedad, se utiliza para la fabricación de diversos objetos. Entre ellos están muebles, vigas, canoas y postes.
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