Nuestro lector Dave Patrington tuvo la idea de preguntar: “¿Por qué muchas serpientes tienen diseños y colores en el vientre?”. Si eres un reptil que se arrastra por el suelo, ¿no te parece un desperdicio de ornamentación?
Una panza llena de variaciones
La llamativa cuadrícula de la serpiente del maíz es un buen ejemplo de este tipo de decoración corporal. En su caso, imita una mazorca, posible razón de su nombre.
Sucede que “los patrones del vientre no son muy comunes en los reptiles”, informa Kate Jackson de Whitman College, en el estado de Washington. Por el contrario, los reptiles suelten presentar colores uniformes más pálidos o intensos en la parte superior.
Ese contraste se llama contrasombreado y es un tipo de camuflaje que “ocurre en la mayoría de los grupos animales”, agrega Whit Gibbons, autor y herpetólogo del Laboratorio de Ecología del Río Savannah en la Universidad de Georgia. (Lee: Animales que se visten para triunfar)
Un ejemplo es la culebra verde lisa. La luz del sol hace que el verde oscuro de su lomo parezca más claro, de suerte que se fusiona con el verde claro de su vientre. El resultado es un color uniforme difícil de detectar, sobre todo en pastos verdes.
No obstante, hay otros colores que pretenden llamar la atención, “como rojo, anaranjado y amarillo. Son lo que llamamos ‘colores de advertencia’”, explica Jackson, porque suelen asociarse con especies venenosas. A veces, el contraste de colores –como el de las inofensivas serpientes de collar, que son negras por arriba y rojo claro por debajo- sirve como “coloración destellante” y confunde brevemente al depredador.
“Cuando un depredador descubre y perturba a la serpiente –digamos que la levanta o la hace rodar-, la sorpresa del vientre pálido o los colores de advertencia (amarillo/anaranjado) podría dar al reptil unos instantes para escapar”, dice Gibbons.
Video: La madre conejo contra la serpiente
Las víboras acuáticas también presentan combinaciones de color. Las serpientes acuáticas con bandas (Nerodia fasciata) tienen complejos patrones en el vientre y pasan mucho tiempo nadando. Sus patrones “pueden ser muy eficaces contra depredadores como tortugas mordedoras o peces grandes que las detectan desde abajo”, informa Gibbons.
En cambio, fieles a su nombre, las serpientes acuáticas de vientre simple (Nerodia erythrogaster) no presentan patrones complejos. Como pasan mucho tiempo en tierra sin mostrar el vientre, se benefician más del contrasombreado que de la coloración destellante.
Franjas de carreras
Lee Fitzgerald, herpetólogo de la Universidad de Texas A&M, dice que las vertiginosas variaciones de color de las serpientes también permiten el mimetismo.
Las coloridas franjas de la venenosa serpiente de coral oriental es una advertencia para depredadores potenciales.
Foto: Joel Sartore, National Geographic Creative
Por ejemplo, la serpiente de coral oriental es una víbora venenosa de coloridas franjas que anuncian su peligrosidad a depredadores potenciales. Aunque la serpiente rey escarlata es inofensiva, usa su color para hacerse pasar por una mortífera serpiente de coral. Las dos se parecen tanto que fue necesario inventar una rima para ayudarnos a recordar cuál es cada una.
Le pregunté a Gibbons por las brillantes franjas de la serpiente de liga de San Francisco, en parte porque son muy bonitas y en parte porque, ¿quién iba a imaginar que San Francisco tenía su propia serpiente de liga?
Las franjas crean una “ilusión óptica”, respondió Gibbons. Debido al patrón, el ojo no puede enfocar al animal moviéndose rápidamente, hasta que “de pronto, vemos la cola desapareciendo en la hierba”.
“Además”, agregó, “los californianos esperan que sus serpientes luzcan las modas más elegantes”.