Un estudio sugiere que su carga de alto voltaje hace más que aturdir a las presas.
Siempre se ha pensado que el golpe de alto voltaje de una anguila eléctrica es uno de los ataques más poderosos de la naturaleza. Pero ahora, un científico ha descubierto que los animales nocturnos también usan sus ondas de choque para rastrear presas en la oscuridad.
Desde hace siglos, los científicos han tratado de desentrañar el secreto de la anguila eléctrica, mas este animal, que en realidad es un tipo de pez cuchillo, es en extremo difícil de estudiar.
Las anguilas eléctricas viven en las lejanas y fangosas aguas de la Cuenca del Amazonas, en Sudamérica, donde resulta muy complicado observarlas en su hábitat natural. Por otra parte, es todo un desafío capturar a un animal que puede alcanzar un tamaño de 2.4 metros de largo y generar una carga eléctrica de hasta 600 voltios, un golpazo suficiente para derribar a un caballo.
Además, su ataque es muy, pero muy rápido, dice Ken Catania, neurobiólogo de la Universidad de Vanderbilt y autor del estudio publicado en Nature Communications. Apenas unos milisegundos después que el animal desata su descarga eléctrica, la cabeza ya está en movimiento para engullir a la presa paralizada.
Tras engañar a las anguilas para que usaran su arma secreta en el laboratorio y registrar los ataques en video de alta velocidad, Catania ha descubierto un aspecto hasta ahora desconocido de su técnica de caza. ?La anguila usa su ataque eléctrico, simultáneamente, como arma y sistema sensorial?, informa. ?Es una habilidad como de ciencia ficción?.
Un relámpago en la oscuridad
Las anguilas eléctricas tienen miles de células especializadas llamadas electrocitos, las cuales almacenan energía como una batería y luego la descargan. Cuando la anguila caza, usa su carga de alto voltaje para inutilizar los músculos del pez, algo parecido al efecto de una pistola Taser, y luego succiona la presa con la boca. Las anguilas también pueden usar la carga para protegerse de depredadores, como un caimán.
En un estudio anterior, Catania demostró que las anguilas eléctricas pueden usar sus ataques de alto voltaje para sonsacar a las presas de sus escondites haciendo que los músculos de los peces se contraigan. De esa forma, la anguila detecta el movimiento y succiona la presa.
No obstante, lo que hasta ahora no se había esclarecido era cómo sabía la anguila dónde se encontraba la presa después de paralizarla. Como un faisán derribado en pleno vuelo, un pez que nada rápidamente puede seguir desplazándose en el agua llevado por el impulso, aun después que las descargas de la anguila hayan desactivado sus músculos.
Para entender qué sucedía, Catania llevó anguilas eléctricas al laboratorio y les entregó peces anestesiados, los cuales había metido en bolsas de plástico para aislarlos de los electrorreceptores de las anguilas. Catania estimuló un pez con un electrodo para ocasionar una contracción. La anguila descargó su ataque de alto voltaje, pero al parecer, no supo qué hacer después: la anguila se lanzó en dirección del movimiento en el agua, mas no trató de succionar al pez.
Luego, Catania metió al pez en el tanque junto con una varilla de carbono eléctricamente conductiva. Hizo que el pez se contrajera y la anguila atacó con una descarga. La anguila a veces se movía en dirección del pez, pero luego cambiaba su curso y embestía contra la varilla en cualquier punto del tanque donde se encontrara. Era como si la anguila percibiera al pez en dos lugares al mismo tiempo.
El ?conflicto sensorial? de la anguila aumentó cuando Catania colocó la varilla en una rueda giratoria, pero sin el pez. Las anguilas se daban vuelta después de la descarga eléctrica intentando succionar lo que percibían como un pez, pero que, en realidad, era la varilla en movimiento.
?La anguila enciende su alto voltaje como un medio de desactivar al pez?, dice Catania, ?y al mismo tiempo, usa ese alto voltaje para rastrear dónde se encuentra el pez?.
Murciélagos, ballenas y? ¿anguilas eléctricas?
El ataque de la anguila tal vez sea singular, pero podemos encontrar algunos aspectos de sus súper poderes en otros animales. Por ejemplo, tiburones, rayas y otras especies pueden percibir los campos eléctricos que les rodean. Y los murciélagos y algunas ballenas dentadas producen sonar, el cual les ayuda a cazar escuchando el sonido reflejado.
Video: El equipo que forman las orcas para cazar su comida
La ecolocación del murciélago y la electrolocación de la anguila tienen cierta semejanza, pues ambos animales emiten pulsos de alta frecuencia justo antes de capturar a la presa, señala Aaron Corcoran, investigador postdoctoral de la Universidad de Wake Forest y experto en sonar. ?Por supuesto, los murciélagos no paralizan a sus presas?, agrega. ?El hecho de que las anguilas electrolocalicen a sus presas al tiempo que las aturden, es a la vez asombroso e intrigante?.
Los hallazgos podrían ayudar a esclarecer cómo evolucionó el golpe de la anguila eléctrica, un enigma en el que Charles Darwin reflexionó en ?El origen de las especies?. Catania dice que ahora parece probable que la carga de alto voltaje de las anguilas evolucionara, inicialmente, como un medio para percibir su entorno y que después se convirtiera en arma.
Antes de empezar a estudiar a estos animales, Catania solía pensar que las anguilas eléctricas eran bastante primitivas. ?Ahora que he profundizado en los detalles?, dice, considera que la anguila ?es uno de los depredadores más sofisticados que existen?.
Científicos obtuvieron la imagen de una estrella de fuera de esta galaxia. Es el acercamiento mejor logrado, en su tipo,…
La danza del antiguo Egipto se transformó a través de los imperios. Los movimientos solemnes de los rituales dieron paso…
Haciendo varias simulaciones de escenarios posibles, la NASA llegó a la respuesta más firme sobre cómo Marte obtuvo sus lunas.…
Con apoyo de una agencia especializada, te decimos por qué el mar es azul, aun cuando el agua no deja…
Delle, un delfín que vive solo en el Mar Báltico, parece hablar consigo mismo, probablemente para sentirse acompañado. Los delfines…
Aquí va una buena razón para visitar París este diciembre: Notre Dame volverá a abrir sus puertas después de cinco…