La muerte del gorila en el Zoológico de Cincinnati, tras la caída de un menor a su espacio, es una de varias registradas en una semana en zoológicos de todo el mundo.
La muerte de un gorila en el Zoológico de Cincinnati es un cruel recordatorio de las fallas de seguridad ?para animales y humanos- que siguen afectando a los zoológicos de todo el mundo.
El sábado 28 de mayo, funcionarios del Zoológico de Cincinnati mataron a tiros a Harambe, un gorila occidental de llanura de 17 años, en un esfuerzo para proteger a un niño que había caído en el espacio del animal.
La muerte de Harambe ocurre en un momento en que la vida de cada gorila es vital: los gorilas occidentales de llanura se encuentran en peligro crítico de extinción, con menos de 175,000 animales en la naturaleza.
Hay unos 765 gorilas como Harambe en zoológicos de todo el mundo, de los cuales 360 son miembros de un programa de reproducción en cautiverio.
Desde 1990 han muerto animales durante fugas o ataques en 42 ocasiones en zoológicos estadounidenses acreditados por la Asociación de Zoológicos y Acuarios, según una base de datos compilada por Born Free USA, grupo defensor de los animales sin fines lucrativos. En ese mismo lapso, 15 incidentes en zoológicos condujeron a la pérdida de vida humana, y 110 resultaron en lesiones, incluido el incidente del Zoológico de Cincinnati.
Harambe es el primer gorila sacrificado a tiros en un zoológico estadounidense desde 2004, año en que Jabari, un gorila occidental de llanura de 13 años, escapó del Zoológico de Dallas y atacó a varias personas antes de arremeter contra unos oficiales de policías, quienes lo mataron.
Los zoológicos estadounidenses han atribuido 15 casos de lesiones humanas a primates en ocasiones separadas desde 1990, lo que representa menos de un séptimo del total de lesiones humanas. No obstante, ningún primate ha estado implicado en un accidente letal en un zoológico estadounidense en los últimos 26 años.
En cambio, los grandes felinos, como leones y tigres, han lesionado o matado humanos en 41 incidentes distintos desde 1990, con un total de cinco muertes.
Y, en dos ocasiones separadas, en 1986 y 1996, gorilas cautivos de Estados Unidos y el Reino Unido fueron celebrados por ?proteger? a niños pequeños que cayeron en sus recintos.
Entrevistado por la estación noticiosa local WLWT, un visitante del Zoológico de Cincinnati, quien presenció el incidente del sábado, describió las acciones de Harambe como igualmente protectoras. Sin embargo, funcionarios del zoológico afirmaron que la vida del menor estuvo en peligro inminente, pues Harambe arrastró al niño por un foso que rodea el recinto.
Los estándares de seguridad y bienestar animal varían mucho en todo el mundo, y la muerte de Harambe es, difícilmente, el único accidente ocurrido en un zoológico en las últimas semanas.
El 23 de mayo, un hombre ebrio estuvo a punto de ser lesionado cuando saltó a un recinto del Parque Zoológico Nehru, en India, donde trató de tocar a dos leones. El 21 de mayo, funcionarios del Zoológico Nacional de Chile tuvieron que disparar y matar a dos leones, luego que un hombre de 20 años saltó al recinto en un intento suicida.
Varios días antes, una morsa ahogó a un visitante y a un vigilante en el Zoológico de Vida Silvestre de Yeshanko, China, cuando el visitante ingresó en el recinto de la morsa y empezó a hacerse selfies con el pinnípedo.