Si los murciélagos vampiro y las polillas chupasangre son espeluznantes, qué decir de sus parásitos.
La temporada de fantasmas, monstruos, muertos y brujas trae consigo historias de animales que te llenan de agujeros y? ¡se comen tus entrañas!
Pero este año, en vez de repudiar a estos vampiros, tal vez podamos encontrar algo en común con ellos. Porque hasta los chupasangre que más despreciamos son asediados por criaturas hambrientas de sangre.
?Comer sangre es una forma de vida que ha evolucionado independientemente en muchos grupos de animales?, dice Tommy Leung, parasitólogo de la Universidad de Nueva Inglaterra, Australia. Añade que comer sangre, o hematofagia, es una conducta muy común y ?se observa en más de catorce mil especies animales vivas, incluso en grupos que mucha gente ni siquiera imagina?.
Vampiros sobre vampiros
Solo tres de las casi 1,400 especies conocidas de murciélagos son vampiros. Pero, ¿sabías que hasta estas especies son depredadas por chupasangres?
Muchas especies de quirópteros tienen que vérselas con moscas ápteras hematófagas, que pueden parecerse a los monstruos de ?Alien?, esos que se te pegan a la cara. Sin embargo, los murciélagos vampiros la pasan peor que la mayoría de las especies.
?Los vampiros tienen más parásitos que el promedio de los murciélagos?, dice Gerald Carter, biólogo de quirópteros e investigador postdoctoral en el Instituto Smithsoniano de Investigación Tropical en Panamá.
Los investigadores de un estudio capturaron cientos de especímenes de 53 especies de murciélagos para evaluar la prevalencia de parásitos y hallaron que dos especies de murciélagos vampiros tenían algunas de las mayores cargas de moscas ápteras. Un vampiro común, particularmente infortunado, estaba cubierto por 63 moscas chupasangre.
Y esos bichos pueden ser implacables.
También te puede interesar: La verdad detrás de los vampiros
Una colega de Carter se encontraba en Belice estudiando a los murciélagos y sus moscas, para lo cual marcaba a ambos con minúsculas gotas de pintura. Cierta vez, soltó a un murciélago con una mosca marcada y observó que la misma mosca regresaba durante la noche, pero siempre llegaba encima de un murciélago distinto que no estaba marcado.
?Al parecer, el murciélago marcado regresó al nido y la mosca cambiaba de huéspedes?, dice Carter.
¿Todavía no compadeces a los vampiros? Imagina qué sentirías si tuvieras uno o más de estos pequeños monstruos arrastrándose por todo tu cuerpo.
Picos punzantes
Seguro que jamás asociarías la Noche de Brujas con el pinzón, pero más vale que lo hagas. En la isla Wolf, en las Galápagos, hay una especie conocida por su hábito de picotear la piel de aves más grandes para luego lamer la sangre que mana.
Lo llaman pinzón vampiro o pinzón terrestre de pico afilado.
Aunque la técnica de sangría del pinzón es realmente grotesca, se cree que la conducta contribuye a la supervivencia del ave en épocas de sequía extrema.
Por supuesto, es muy posible que hasta los pinzones vampiro deban tolerar que les chupen la sangre. Esto se debe a que las aves son una de las comidas favoritas de los mosquitos.
Cazadores de vampiros
Los mosquitos son, sin lugar a dudas, uno de los seres más miserables de la Tierra. Sus picaduras no solo causan comezón, sino que estos omnipresentes insectos diseminan infinidad de enfermedades que ocasionan millones de muertes anuales en todo el mundo.
Pero ni siquiera los mosquitos son inmunes a un poco de pérdida sanguínea.
Se ha documentado que diminutos insectos, llamados quironómidos, se alimentan de al menos diecinueve especies de mosquitos. Semejantes a los mosquitos que parasita, el quironómido tiene una afilada estructura bucal llamada probóscide, la cual utiliza para perforar el abultado vientre del mosquito y succionar la sangre recién ingerida. En algunos casos, esto puede causar daños en los órganos del mosquito.
Es más, los científicos han descubierto una especie de araña saltadora, Evarcha culicivora, que ataca directamente a los mosquitos que tienen el vientre repleto de sangre.
Pero como el objetivo de las arañas es el mosquito entero y no solo la sangre, explica Leung, ?podríamos decir que E. culicivora es más una cazadora de vampiros que una vampira?.
Polillas chupasangre
Muchas polillas son frugívoras, es decir, comen frutas. Usan sus estructuras bucales para perforar la superficie de un fruto y luego succionan los jugos, más o menos como hace un mosquito cuando ataca a una persona.
Sin embargo, un género de polilla, llamado Calyptra, usa su apéndice come-frutas con otro propósito: beber la sangre de mamíferos como tapires, rinocerontes e incluso, humanos. Jennifer Zaspel, becaria National Geographic y directora de la Colección Purdue para Investigación Entomológica, informó de esta conducta en 2008.
Pero antes que empieces a tener pesadillas con una Mothra chupasangre, piensa que es mucho más común que las polillas y las mariposas sean víctimas de la hematofagia.
Muchas criaturitas chupan sangre directamente de las alas de mariposas y polillas, señala Andy Warren, científico especializado en mariposas y polillas, y administrador de la colección del Centro McGuire para Lepidópteros y Biodiversidad en el Museo de Historia Natural de Florida. Esos bichos incluyen ácaros, moscas y minúsculas avispas parasitarias, cuyas larvas devoran a los lepidópteros de adentro hacia fuera.
Hasta ahora no se han documentado parásitos de las polillas chupasangre, pero ?creo que sería justicia poética si también atacaran a las polillas Calyptra?, dice Warren.