Blog en moto | Horneados en Cartagena

Declarada Patrimonio Histórico y Cultural por la UNESCO, Cartagena se ha convertido en un destino turístico internacional.

Navegamos por el Caribe alrededor de 26 horas sin librarnos de un par de mareos y malos pasos por la cubierta. Al amanecer avistamos la bahía de Cartagena, la cual se encontró rodeada de edificios, una marina y -a un extremo- el antiguo fuerte de San Felipe.

Desembarcar las motos volvió a ser una aventura y pasarlas por la aduana fue aún más tardado; aún así, al final del día nos encontramos legalmente en Colombia. Nos hospedamos justo afuera de las murallas de la ciudad antigua, en un barrio que cada noche se prendía con una gran fiesta callejera.

A pesar de su belleza y rica historia, Cartagena tiene un problema; el calor. Con una humedad de casi el 100% y temperaturas arriba a los 35 ºC, disfrutar del día y la noche en esta bella ciudad se vuelve una odisea.

La muralla que rodea al centro histórico es impresionante, y dentro de ella se pueden apreciar iglesias, palacios y edificios gubernamentales que datan de la colonia y que sobrevivieron los constantes embates de piratas y mercenarios. Los colores amarillo, blanco y rosa dominan la ciudad.

Fue después de un par de días conociendo las fachadas amarillas, blancas y rosas, que decidimos seguir hacia el sur en busca de tierras más templadas.