Guía para viajar al fin de la tierra: Así debes empacar para ir a la Antártida

El desierto más grande del mundo no tiene arena, solo kilómetros de hielo. Para viajar a la Antártida necesitas más que una buena chamarra.

La Antártida se extiende por casi 14 millones de kilómetros cuadrados, no tiene arena, ni sol, ni siquiera una población nativa; sin embargo, es considerado el desierto más grande del mundo. Es también un destino enigmático, un punto en la libreta de cualquier alma aventurera, ¿qué viajero se resistiría a los ecos de un glaciar, o al avistamiento de un oso polar?

Si deseas viajar a este rincón de la tierra, Quark Expeditions, la empresa líder en exploraciones polares, te tiene cubierto. Pero antes que nada, debes asegurarte de tener lo que se requiere para soportar las condiciones del continente blanco. Esto es, más que una chamarra de invierno.

Para la Antártida mejor vestir en capas

Seguramente lo has escuchado, vestir en capas es la clave para enfrentar climas extremos, ¿la razón? Esta es la única manera de mantener tu cuerpo libre de humedad y bajo una temperatura constante; también, garantiza la libertad de movimiento. Si vas a viajar a la Antártida, lo menos que quieres es pasar frío o incomodidad.

Por esto, se sugieren tres capas; la capa base, la intermedia y la exterior. Expliquémoslo de afuera hacia adentro. La capa base consiste en vestir ropa interior térmica, de lana o materiales sintéticos que absorban cualquier humedad. Esta primera capa es esencial para mantenerte seco y caliente.

La siguiente capa, la intermedia, consiste en aislar de manera adicional a través de un forro polar o una chamarra ligera. Finalmente, la capa exterior, funciona como protección contra la nieve y el viento, por lo que se sugiere una chamarra impermeable o un cortaviento con gorra.

¡Importante! Además de tus tres capas, debes empacar pantalones impermeables. En Quark Expeditions, te proporcionan unas parkas especiales que podrás guardar como souvenir, junto con tus fotos y postales.

Además de ropa.. accesorios para la Antártida

Podrán ser el elemento secundario de tu conjunto, pero un gorro de lana, unos guantes y una bufanda/ cuello polar te ayudarán a enfrentar el viento y las superficies heladas. Para evitar que tus dedos se agarroten o que tus manos se entorpezcan se recomiendan guantes táctiles e impermeables. Y si llevas gorro, asegúrate que te cubra bien las orejas

Evita la ceguera de nieve; protege tu piel y ojos del sol

No es el desierto del Sahara, pero tendrás que protegerte del sol como si así fuera. La ceguera de nieve ocurre con la reflexión del sol en el hielo; para protegerte, deberás llevar unas gafas de sol polarizadas con protección UV.

También deberás proteger tu piel, y tus labios con protector solar y bálsamo con SPF respectivamente.

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No dejes de tomar fotos

La Antártida es un paisaje tan remoto como hermoso. Por eso, la mejor manera de recordar la sensación sublime de una aurora boreal o de una cría de foca, será a través de un retrato.

Deberás llevar un lente telefoto o una cámara con un buen zoom. Empaca suficientes tarjetas de memoria, una funda impermeable para tu equipo, y sobre todo, baterías de repuesto… las bajas temperaturas drenan la energía, y en la Antártida la temperatura más baja es de -80°C.

Prepara tu bolsa de expedición

Para aquellas largas caminatas bajo el cielo límpido, opta por una mochila de viaje ligera, bien se sabe que ya llevarás mucha ropa encima. Pon mucha atención a que tu mochila sea impermeable, y cuida que tus pertenencias se mantengan secas.
Cuando compres o selecciones tu equipaje, elige una bolsa ligera, que te resulte fácil de transportar.

Muchas capas, poca ropa

Ya conoces lo esencial para viajar a la Antártida, ahora no lleves de más. Recuerda que las exploraciones al desierto de hielo son en barcos de expedición que no tienen tanto espacio.

Con Quark Expeditions será más fácil planear tu viaje, pero aun así empaca ligero, empaca inteligentemente. Vas a descubrir que para viajar al fin de la tierra solo te debes preocupar por llevar lo esencial.

Este texto fue escrito por Aura Moreno Rosales, periodista de profesión y lectora suspirante. Le gusta trotar por el mundo, sobre todo si es a través de las palabras. Colabora como redactora en National Geographic en Español.