Protegidos por una leyenda, estas aves negras han habitado la fortaleza desde sus hace mil años.
Cuenta la leyenda que si los cuervos que habitan la Torre de Londres se fueran, la fortaleza de mil años de antiguedad caería. Esa fue la razón por la que Carlos II decretó que debe haber por lo menos seis aves de este tipo, y hasta designó a guardianes para encargarse de su cuidado. La presencia de estas aves aquí es tan antigua como la construcción misma.
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Mientras la torre está al cuidado de la organización Historic Royal Palace, para el mejor cuidado de las aves, recién fue inaugurada una estructura en madera de roble y malla de acero que funciona a modo de casa para cuervos.
Se ubica en uno de los sitios donde anteriormente estaba la instalación ?Blood Swept Lands and Seas of Red? ?donde el artista Paul Cummins colocó 888 mil 246 amapolas de cerámica a modo de homenaje por el centenario del aniversario del estallido de la Primera Guerra Mundial y las vidas perdidas en ella-.
La Torre de Londres es uno de los lugares más emblemáticos del Reino Unido, a lo largo de su historia ha servido como palacio real, fortaleza, prisión, lugar de ejecución y arsenal. Hoy es el hogar de los símbolos más importantes de la historia británica, por ejemplo, aquí encontrarás a los Guardianes Yeoman y a las Joyas de la Corona.
En julio del 2015 le fue otorgado el premio como el Museo del Año 2015 otorgado por el Fondo de Arte (artfund.org/prize) en la Tate Modern.
?Ayudamos a todo el mundo a explorar la historia de cómo los monarcas y las personas han dado forma a la sociedad?, afirma la organización encargada del cuidado de la torre.