Más allá de sus famosas playas, Río de Janeiro es un destino ideal para quienes disfrutan del sol, el mar y la cultura vibrante de Brasil.
Río de Janeiro es famoso por sus playas, y la energía de su ambiente cosmopolita. Sin embargo, más allá de sus puntos turísticos, Río cuenta con una serie de playas menos conocidas, pero igualmente hermosas, que permanecen fuera del radar de multitudes.
Estos rincones escondidos ofrecen una experiencia más tranquila, natural y, en muchos casos, una conexión más profunda con la cultura local. Si eres de los que buscan escapar de la multitud y descubrir paisajes menos saturados, estas son las 5 playas que sugiere la fundación Visit Río, ¡y no te las puedes perder!
La playa más grande de Río de Janeiro
La playa de Barra de Tijuca es la más grande de Río de Janeiro, con aproximadamente 18 km. Aunque a menudo es pasada por alto, esta playa ofrece un ambiente más relajado y amplio que el resto. Aquí podrás disfrutar de una zona de conservación ambiental, a través de un increíble paseo por la Reserva de Marapendi.
En verano, la playa lo tiene todo; se practican varios deportes en el mar y la arena, se alquilan carpas e instalan puestos con música, buena comida y bebidas frías.
A lo largo del año, las condiciones del mar varían, con algunos días ideales para nadar y otros solo aptos para el surf. En días más agitados, se señala el peligro con banderas rojas. Durante esos días, una excelente opción es caminar por el paseo marítimo y disfrutar de las vistas.
Si te cansas del sol, la gran cantidad de quioscos cercarnos ofrece un excelente refugio para descansar con una refrescante agua de coco.
En Río de Janeiro encontrarás el paraíso de los surfistas
¡Un tesoro de tan solo 2 kms de extensión!, Recreio dos Bandeirantes es un paraíso de arenas blancas y altas olas, ideal para la práctica de deportes acuáticos como el surf.
Se trata de una playa con una extensa franja de arena, también ideal para la práctica de deportes como voleibol y windsurf. Frecuentada por atletas, tiene la costumbre de ser la sede de campeonatos de surf y bodyboard.
Encima de todo, es el mejor lugar para un baño de sol, pues los edificios que quedan al borde son bajos.
Tip de local: andar en bicicleta por la ciclovía constituye un paseo favorito por los habitantes del barrio.
Eso no es todo, la cereza del pastel se esconde detrás de La Piedra de Pontal, que marca el inicio de una playa reservada y naturaleza exuberante… la escondida playa de Pontal.
La playa tropical de Janeiro: Prainha
Una de las playas más hermosas de Río de Janeiro se ubica dentro del parque Prainha, y está rodeada de vegetación, morros y selva tropical. Su oleaje es también muy conveniente para la práctica de deportes acuáticos, además de contar con una belleza indescriptible.
La Prainha, como su nombre indica, cuenta con una pequeña franja de arena de 700 metros de extensión, resguardada por colinas cubiertas de Mata Atlántica.
Situada al final de la playa de Recreio, se recomienda llegar temprano para disfrutar del sol, que se oculta detrás de las montañas a media tarde. En los quioscos, las opciones recomendadas son sándwiches naturales, jugos y açaí, la receta de un rato tropical.
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De mar esmeralda, Grumari, la playa privada
Ubicada en un territorio de preservación ambiental, lejos del bullicio y las edificaciones, Grumari goza de arenas blancas, y mar verde esmeralda. Más que nada, el atractivo de este espacio nace de la privacidad, pues solo se permite un determinado número de visitantes diarios.
El escenario evoca playas vírgenes con olas potentes, donde la construcción no está permitida. El lugar es visitado a diario por surfistas que buscan mayores oportunidades de encontrar olas grandes. Las olas suelen romper antes de llegar a los bañistas, lo que convierte a Grumari en la playa ideal para todos los gustos.
Extiende tu toalla y disfruta del sol en São Conrado, Río de Janeiro
Este recóndito lugar se caracteriza por su arena clara y suave, así como por las fuertes olas, que son un gran atractivo para los surfistas de la región.
Antiguamente conocida como Praia da Gávea, la playa de São Conrado tiene actualmente una extensión de alrededor de 1 kilómetro, que comienza al final de la Avenida Niemeyer y se extiende hasta el Túnel de São Conrado
Aquí sí es el lugar ideal para extender tu toalla en la arena y pasar un día disfrutando del sol y el mar. En esta playa también se realiza el aterrizaje de parapentistas y ala delta. Si te interesa aventurarte, anota esto: el punto de lanzamiento para el ala delta se encuentra en Pedra Bonita
Ahora ya conoces los tesoros de la Ciudad Maravillosa, pero si quieres descubrir más de sus secretos, explora Visit Río. La plataforma digital de la fundación lo tiene todo, desde recomendaciones, hasta un calendario de eventos, y toda la información que necesitas para planear un viaje perfecto.
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