Para empezar, es hora de romper mitos y rumores cuando de roadtrips se trata: sí, es cierto, en Arizona se encuentra Peach Springs, uno de los pueblos en que se inspiraron los creadores de Pixar, para hacer su divertida película Cars. En el estado del Gran Cañón, también, se extiende la Ruta 66.
Y es que los viajes carreteros no solo forman parte de la cultura de los Estados Unidos. En buena medida, han contribuido a impulsar buena parte de la cultura pop occidental como la conocemos, partiendo de la historia de la mítica “Avenida Principal”, mejor conocida como “Ruta 66” o “Camino Madre”, como la bautizó John Steinbeck en sus Uvas de la Ira (1939). Éste es el mejor recorrido que puedes hacer.
Te sugerimos: Más allá del Golden Gate: 5 experiencias que no vienen en las guías de turista de San Francisco
Ya va a ser un siglo desde que fue trazada la hoy Histórica Ruta 66 que, en su origen, conectaba el Noreste con el Suroeste de los Estados Unidos. Casi 4 mil kilómetros desde Chicago, en Illinois, hasta Santa Mónica, California y, por supuesto, atravesando el estado del Gran Cañón. De hecho, el día de hoy Arizona es el estado que conserva la mayor cantidad de tramos en mejores condiciones, de las 8 entidades por las que pasaba originalmente (Illinois, Misuri, Kansas, Oklahoma, Texas, Nuevo México, Arizona y California).
Varios son los poblados de Arizona marcados por la histórica Ruta 66. De Este a Oeste, podemos mencionar a Holbrook, Winslow, Flagstaff, Williams, Seligman, Peach Springs, Kingman u Oatman, por mencionar los más destacados. En cada uno encontrarás más de un grato recordatorio de esa época que hemos vivido y revivido en más de una película, incluida la de Cars.
Pero así como decimos que Arizona es mucho más que el Gran Cañón, también debes saber que hay muchas más opciones que la Ruta 66. La Carretera 80 fue una de las primeras autopistas de EE. UU. que pasó por Arizona. Es la cuarta ruta histórica reconocida por el estado y en ella podrás hacer un auténtico viaje en el tiempo. A lo largo de unos 100 kms, pasarás por cuatro comunidades que te ofrecerán experiencias completamente diferentes en cada una.
Iniciamos en Benson, sede de los estudios donde se han filmado diversas películas del Viejo Oeste que podrás visitar en compañía de un guía que cuenta las películas mientras paseas sobre una diligencia. Por supuesto, también podrás visitar las Grutas de Kartchner.
Tombstone, “el pueblo demasiado rudo para morir” es, auténticamente, un sitio detenido en el tiempo. En su calle principal te sentirás, en verdad, como si estuvieras en medio de un duelo de fines del Siglo XIX, como el que protagonizó Wyatt Earp.
A su vez, Bisbee es uno de los poblados más sorprendentes, por inesperados, del Suroeste de los Estados Unidos. No es sólo el arte y su comunidad divertida y dinámica, sino su mina, su pueblo abandonado Lowell o su hotel Shady Dell, donde las habitaciones son autobuses o casas rodantes.
A veces creemos que en el desierto no ocurre nada, pero luego descubrimos sitios como Douglas, en la frontera con Agua Prieta, Sonora, con su hotel Gadsden, que tiene más de 100 años de antigüedad luciendo sus escaleras y columnas de mármol italiano o su vitral inspirado en Tiffany.
La autopista 260 serpentea por el centro de Arizona, de Este a oeste, o viceversa. Aquí encontrarás tres lugares -al menos- que te van a encantar: Cottonwood, Pine Creek y Springerville-Eagar. Por su ubicación geográfica y elevación, se trata de un camino «fresco» en el verano, con temperaturas bastante agradables.
Si bien Cottonwood es una ciudad relativamente joven, bien vale la pena visitar su Old Town, en el que encontrarás eclécticas tiendas locales, estupendos restaurantes y salas de cata de los vinos producidos en la región del Verde Valley que, estamos seguros, te sacarán más de una sonrisa.
En tu trayecto al Este, no dejes de pasar por Pine Creek y su granja de Lavanda, donde los alces deambulan al anochecer y las aguas del arroyo Pine Creek gorgotean mientras nutren los campos de lavanda que forman parte de una hacienda de fines del siglo XIX.
Un buen roadtrip no puede estar completo si no tiene en cuenta los espectaculares paisajes que va pasando. Por eso, debes detenerte en el Bosque Nacional Apache-Sitgreaves, en el que destacan, sin duda, el lago Fool Hollow. Un lugar para la renovación espiritual, sin duda.
En tu trayecto hacia el Este, al pasar Show Low, descubrirás que te encuentras circulando por el tercer campo volcánico más grande de los Estados Unidos-un cono detrás de otro- el Springerville Field. Al llegar a esta ciudad, verás un interesante centro cultural, histórico y arqueológico, conocido como Springerville Heritage Center en el que aprenderás sobre las comunidades de la región.
Sigue leyendo:
6 Parques Nacionales de Estados Unidos que todo amante de la naturaleza debe conocer
El misterio de las Islas Diómedes: el único territorio donde colindan Estados Unidos y Rusia
Te contamos la historia de cómo Estados Unidos llegó a proclamar al cuarto jueves de noviembre como el Día de…
Los cabellos grises simbolizan el paso del tiempo, pero su origen se relaciona con más factores que solo la edad.…
La segunda luna de la Tierra está por partir para continuar su viaje cósmico. Antes de que lo haga, te…
Desde que el telescopio espacial James Webb ayudó a visualizarlos, los primeros agujeros negros supermasivos han sido todo un enigma.…
Con esto, los lobos etíopes se convierten en los primeros polinizadores carnívoros, de gran tamaño, de los cuales se tiene…
Las primeras bombas nucleares pusieron en marcha el Reloj del Apocalipsis. Desde entonces, sus manecillas se han movido, anunciado una…