En el horizonte van cambiando las diferentes tonalidades de azul. Azul claro, azul oscuro, una capa de crestas blancas, después color turquesa y gris azulado: el arrecife frente a Le Morne Brabant. Esta montaña en el suroeste de la isla de Mauricio es una mole. Se alza sobre la península como si alguien la hubiera tirado allí.
Escalarla permite ver Mauricio tal como esta isla aparece en tarjetas postales. Iniciamos el ascenso. Una puerta bloquea el camino. Nico Queland y Zack Herbst la abren. Los dos son guías para excursionistas de Yanature, una de las dos organizaciones que tienen permiso para realizar aquí caminatas con turistas, porque el terreno en donde se alza la montaña es desde hace siglos propiedad privada. El sendero serpentea por la montaña. Al principio, el ascenso es suave. De vez en cuando resbalan los pies en el suelo lodoso, porque ha llovido. En este paraíso para turistas, la lluvia no es un fenómeno excepcional. Sobre todo durante los meses de invierno el tiempo en la isla muchas veces cambia cada media hora. Hemos llegado al primer mirador sobre la laguna. En ella hay una pequeña isla. Un rayo de sol que sale por un agujero en las nubes la realza en medio del agua de color turquesa. El grupo de turistas sube otros 200 metros, hasta que el sendero se hace cada vez más estrecho y más empinado. Empieza a llover. Justamente cuando nos espera una escalada empinada. Los pies no encuentran apoyo en las rocas mojadas. Con las manos agarramos pequeñas salientes. Sin embargo, el esfuerzo se compensa con una vista panorámica aún más bonita: a la derecha está la laguna, enfrente la cadena de cerros de la isla y a la izquierda la pequeña isla Île aux Bénitiers. Desde aquí no falta mucho para llegar a la cruz en la cima. Ésta tiene un significado especial que tiene que ver con la turbulenta historia de la isla. Mauricio era en el pasado una isla despoblada en el océano Índico, hasta que llegaron primero colonialistas holandeses, después franceses y británicos y finalmente la independencia. Los franceses llevaron esclavos de África, los británicos, trabajadores de la India. «Los esclavos se habían escondido aquí», relata Queland señalando el monte Le Morne Brabant. En 1835, cuando fue abolida la esclavitud, los británicos subieron a la montaña para dar la buena nueva a los esclavos fugitivos. «Sin embargo, ellos no daban crédito a la noticia de que la esclavitud efectivamente había sido abolida y por eso saltaron al vacío suicidándose para eludir un nuevo cautiverio. Por lo menos, eso es lo que dice la leyenda. No se sabe a ciencia cierta lo que pasó aquí, cuenta Queland. En 2008, la Unesco declaró la montaña Patrimonio de la Humanidad. Para los descendientes de los esclavos, esto fue muy importante, dice el guía. Ellos clavaron la cruz en la cima como recuerdo a los muertos.
Información básica.
Cómo llegar: en avión a Dubái y desde allí tomar un vuelo a Mauricio.La compañía South African Airways vuela a la isla desde Johannesburgo.
Lengua: en Mauricio se hablan varios idiomas, entre ellos el francés y el inglés. La mayoría de los habitantes hablan en el día a día un idioma criollo. Muchos hablan también hindi.
Moneda:
la moneda oficial de Mauricio es la rupia. Un euro equivale a unas 38,
un dólar a unas 34 rupias mauritanas (30 de agosto de 2016). Información: Mauritius Tourism Promotion Authority (MTPA), Victoria House, St Louis Street 11302 Port Louis (tourism-mauritius.mu).