Tips para no morir en el intento
Cuando se tienen hijos muy pequeños, viajar puede ser una pesadilla. Aquí los consejos esenciales para lograr que se convierta en todo lo contrario, y refutar a todos aquellos que piensan que con niños lo bueno se acaba.
Diversión para todos
Debes encontrar un punto medio para no agotarte o aburrirlos. Opta por hoteles todo incluido de buena calidad. Estos últimos, además de garantizarte alimentos para todos los gustos, ofrecen descanso y diversión sin que tengas que preocuparte por la seguridad de los niños.
Motívalos
Si el trayecto es largo o hay demasiada gente en las filas, platica y muéstrales fotos del lugar que están a punto de conocer. La emoción será tanta que esos momentos de espera los convertirá en personas pacientes. Si aún son bebés, consigue accesorios cómodos y prácticos para cargarlos, como los fulares y mei tai, que son fantásticos y además de ergonómicos te permiten tener las manos libres.
Encuentra más consejos en la edición enero-febrero de la revista National Geographic Traveler.